Teatro contra la ignorancia

Youssef Abrache (1986),con  Lourdes Salazar, María Karina de Gouveia
y Raquel de Freitas.

¿Ha provocado la aparición del SIDA un nuevo lenguaje artístico? ¿Ha nacido una manera diferente de expresión estética? ¿En qué consiste  el efecto del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida sobre la creación artística? ¿Existe una relación artística literaria entre esa enfermedad y la novela, la poesía y el teatro?

Esas cuatro preguntas nos las hicimos y las respondimos en nuestro libro El arte del SIDA, Caracas, 1993, y las hemos recordado porque el caraqueño Youssef Abrache, nutricionista y dietólogo, quien vive ahora en Montevideo, escribió y montó su pieza teatral 0+ ¿Ironías?, donde se aborda la temática VIH/SIDA, la cual se estrenó e hizo una breve temporada en la Sala Cabrujas, con los actores  Andrés Vega, Rene Brito, Lourdes Salazar, Maria Karina de Gouveia, Raquel de Freitas, Aronix Morales y Arquímedes González.

Sobre las razones que tuvo para escribir una obra sobre el VIH/SIDA, Abrache explica: El teatro es el mejor espacio para tratar y discutir cualquier tema, en especial los polémicos, porque es un espacio libre. Para nadie es un secreto que pese a todos los maravillosos avances médicos del siglo XXI, hablar del VIH y del SIDA todavía sigue siendo un tabú, pero la realidad es que existe un excelente pronóstico si hay un diagnóstico oportuno y un tratamiento adecuado. Mi pieza  0+¿Ironías? no habla como tal del SIDA ni tampoco del VIH, sino de los prejuicios que giran en torno a quienes portan dicho virus, en un mundo que además sigue desconociendo el tema, su prevención y su tratamiento.

¿Qué teatros sobre el VIH/SIDA ha leído?

En lo que respecta a textos venezolanos, tengo el conocimiento de la pieza teatral  Mátame mamá  de Elio Palencia. Por otro lado, también sé de la obra  The normal heart  del norteamericano Larry Kramer. Quisiera acotar mi persistente interés en la materia como profesional de la salud y como teatrero. Es por ello que he seguido (muy de cerca y desde hace algún tiempo) múltiples producciones cinematográficas y televisivas que hablan del VIH/SIDA desde distintos puntos de vista. Resalto, además, que parte de mi motivación en escribir y dirigir esta obra, viene de la necesidad que he percibido de hablar más sobre el tema en las tablas venezolanas.

¿Cómo fue el trabajo con los actores?

 0+ ¿Ironías?  es la historia de Pedro y Daniel. Pedro es un joven promiscuo e inestable, con rasgos esquizoides (entre ellos la  interacción con su amiga imaginaria "Miranda", que constituye su superyó) mientras que Daniel (también homosexual), es por el contrario un profesional y estable, que por un descuido resultó ser infectado por el virus del VIH, al mantener relaciones sexuales sin protección con su pareja de toda la vida: Alfonso.
Lo irónico de la historia, es que el muchacho promiscuo, siempre se mantuvo negativo pese a su estilo de vida; mientras que Daniel monógamo en su relación, resultó ser positivo. Cuando ambos se conocen, después que la entrega de sus resultados se confundiera, se ven obligados a lidiar con sus miedos, sus inseguridades y sus fantasmas, que no son más que sentimientos vinculados al prejuicio humano. Miranda es un personaje surreal, que tiene un rol importante y tres actrices la personifican; representa a la sociedad y a los ideales del deber ser. También se participan en la historia: Luis (médico y mejor amigo de Daniel) y Mariano (amante pasajero de Pedro).El montaje se logró gracias al trabajo en conjunto de la Agrupación Teatral Arte Abstracto, con Ambigú Producciones, con la cual se han llevado a escena  piezas de mi autoría (Uniforme escolar  y  0+ ¿Ironías?) y de John González Vicent (Obsesión  y  Mi país en mi maleta). Todo esto, bajo la asesoría oportuna de la Fundación Acción Solidaria, desde su impecable experiencia en el área.

¿Qué busca  con su teatro sobre el VIH/Sida?

Mi sueño es que podamos demoler los prejuicios en la materia. Dar a entender que el VIH es una condición con la que se puede vivir bajo el tratamiento adecuado y que lo que realmente mata es el desconocimiento. Busco, que hasta el mismo tema de la homosexualidad sea naturalizado. En esta obra, por ejemplo, los personajes no se cuestionan por ser homosexuales y sus problemas no giran en torno a su orientación, por lo cual cualquier persona que la vea (independientemente de su preferencia sexual) podrá entender y sentirse identificado con el mensaje.

¿Cree que el teatro puede educar sobre el VIH/SIDA?

Creo ciegamente en la educación y más desde las tablas. El teatro tiene un poder mágico, porque permite que el espectador pueda salir de su butaca para participar activamente en la historia que transcurre, moviendo así su mente y su corazón. Considero que el VIH/SIDA ya no constituye una amenaza por sí misma, la amenaza es el desconocimiento.