En estos días cuando las maletas y los maletines es tan de moda porque algunos son utilizados para transportar al exterior no precisamente las prendas íntimas de sus dueños, sino impresionantes cargamentos de papel moneda de dudosa procedencia, aparece un venezolano con un libro de 258 páginas, publicado por Editorial Alfa, donde se alude a las modestas, mínimas y hasta simbólicas valijas que acompañaron a miles de portugueses que escogieron a Venezuela como su patria para trabajar, prosperar, amar y criar a sus hijos, desde la década de los 40 del siglo XX.
Con Portugal en la maleta, el titulo de la publicación de Antonio de Abreu Xavier (49 años), es una obra inédita en la historiografía venezolana de la inmigración. En ella, su autor escudriña a través de numerosas fuentes, en especial con historias de vida, tanto las privaciones cotidianas en Portugal - que impulsaron a miles de hombres y mujeres a cruzar el Atlántico- como las condiciones cambiantes de la sociedad venezolana, a las que se adaptaron los recién llegados en diferentes oleadas migratorias. Ahí se asienta la trascendencia de la comunidad lusitana en las historias comunes de Venezuela y de Portugal.
Antonio de Abreu Xavier -licenciado y doctor en Historia de la Universidad Central de Venezuela, autor de numerosos artículos académicos sobre la inmigración portuguesa en revistas especializadas y de Carl Richard. Una epopeya sin gloria (2005)-advierte que las estadísticas venezolanas sobre la inmigración difieren mucho de las lusitanas, por lo cual contabilizar una población a través de una embajada es falsear un “poquito” la realidad. Advierte que hay diferencias en las estadísticas oficiales portuguesas y venezolanas. “Mis datos, basados en censos venezolanos y listas de emigración lusa, indican que 1981 registró el mayor estimado de individuos que salieron con destino a Venezuela o ya residían en el país: unos 144.500 portugueses, en promedio redondo. Hoy, su edad superior ronda 90 años y la media inferior entre 50 y 60 porque el arribo de niños portugueses bajó a mediados de la década de 1960 cuando cada madre traía entre 2 a 3 hijos. Si multiplicamos esta media por el estimado de portugueses, el resultado podía ser dado por el total de la comunidad, unos 400.000 individuos, e incluye a los luso-venezolanos como es mi caso”.
-¿Qué lo llevo a escribir este libro?
-Una reflexión sobre la herencia histórica familiar me llevó a tomar la decisión en el año 1996. Posteriormente, mi preocupación personal fue respaldada por la proliferación de unos agresivos panfletos distribuidos en la parroquia Candelaria. A partir de ahí me propuse recoger los testimonios de la comunidad portuguesa para conocer cómo ella había vivido ese proceso de adaptación y de inserción en la sociedad venezolana y así fue que surgió este libro. Pero este proyecto, después del año 2002, tomó dos vías: la académica, porque con las historias hice un trabajo doctoral, y la otra vía fue la comunitaria, para tratar de despertar la conciencia de los portugueses y su importancia dentro del proceso histórico venezolano. Lo que hice fue proponerle a un periódico de la comunidad lusitana en Venezuela que creara una sección que se llamara ‘Historias de vidas” y ese espacio, que ya tiene dos años, porque comenzó en el años 2005, ha tenido continuidad en el tiempo de esa publicación. De una preocupación personal, muy propia, y de un momento especifico surgió este texto que ha tenido dos vertientes: una de alcance nacional y otra de alcance comunitario como son las historias de vida.
-¿Qué hicieron los portugueses en los últimos 60 años?
-La inmigración comenzó a llegar hacia 1948 y la mayoría se dedicó al comercio al detal para garantizar su sobrevivencia, pero muy pronto la comunidad comenzó a diversificarse y ahora la mayoría esta enrumbada hacia la pequeña y mediana industria, sobre todo en el sector de las manufacturas. Es decir que en menos de 20 años dejaron los abastos y pasaron a otros niveles tan importantes.
-¿Cómo son esas historias de vida de la comunidad portuguesa?
-Mi libro compila 234 historias de vida y entrevistas que realice yo solo. Esa es la medula de la publicación y además hace parte de mi tesis doctoral, la cual reposa en la biblioteca de la UCV. Algunas de las historias y las entrevistas se realizaron en 30 minutos, en unos casos, pero en ocasiones se consumieron hasta cuatro horas. Lo importante de las historias de vida es que la gente abrió las puertas de su casa, sus mentes, sus corazones. Incluso me revelaron secretos íntimos. Finalmente, expresó que este libro debe ser leído por todos aquellos venezolanos que quieran marcharse al extranjero, porque deben conocer como explotar sus capacidades personales fuera de su país y en un medio extraño. ”Deben conocer realmente esta historia, el ejemplo que tenemos de las comunidades inmigrantes en Venezuela. Quien quiera saber como sacarle provecho al ambiente en que ha sido creado, las relaciones , lo que es llevarse a la cabeza el contexto sociológico venezolano y recrearlos en otro pais y no sentirse desvenezolanizado tiene que leer este libro, para entender como funciona la relación social fuera del país de origen”.
Con Portugal en la maleta, el titulo de la publicación de Antonio de Abreu Xavier (49 años), es una obra inédita en la historiografía venezolana de la inmigración. En ella, su autor escudriña a través de numerosas fuentes, en especial con historias de vida, tanto las privaciones cotidianas en Portugal - que impulsaron a miles de hombres y mujeres a cruzar el Atlántico- como las condiciones cambiantes de la sociedad venezolana, a las que se adaptaron los recién llegados en diferentes oleadas migratorias. Ahí se asienta la trascendencia de la comunidad lusitana en las historias comunes de Venezuela y de Portugal.
Antonio de Abreu Xavier -licenciado y doctor en Historia de la Universidad Central de Venezuela, autor de numerosos artículos académicos sobre la inmigración portuguesa en revistas especializadas y de Carl Richard. Una epopeya sin gloria (2005)-advierte que las estadísticas venezolanas sobre la inmigración difieren mucho de las lusitanas, por lo cual contabilizar una población a través de una embajada es falsear un “poquito” la realidad. Advierte que hay diferencias en las estadísticas oficiales portuguesas y venezolanas. “Mis datos, basados en censos venezolanos y listas de emigración lusa, indican que 1981 registró el mayor estimado de individuos que salieron con destino a Venezuela o ya residían en el país: unos 144.500 portugueses, en promedio redondo. Hoy, su edad superior ronda 90 años y la media inferior entre 50 y 60 porque el arribo de niños portugueses bajó a mediados de la década de 1960 cuando cada madre traía entre 2 a 3 hijos. Si multiplicamos esta media por el estimado de portugueses, el resultado podía ser dado por el total de la comunidad, unos 400.000 individuos, e incluye a los luso-venezolanos como es mi caso”.
-¿Qué lo llevo a escribir este libro?
-Una reflexión sobre la herencia histórica familiar me llevó a tomar la decisión en el año 1996. Posteriormente, mi preocupación personal fue respaldada por la proliferación de unos agresivos panfletos distribuidos en la parroquia Candelaria. A partir de ahí me propuse recoger los testimonios de la comunidad portuguesa para conocer cómo ella había vivido ese proceso de adaptación y de inserción en la sociedad venezolana y así fue que surgió este libro. Pero este proyecto, después del año 2002, tomó dos vías: la académica, porque con las historias hice un trabajo doctoral, y la otra vía fue la comunitaria, para tratar de despertar la conciencia de los portugueses y su importancia dentro del proceso histórico venezolano. Lo que hice fue proponerle a un periódico de la comunidad lusitana en Venezuela que creara una sección que se llamara ‘Historias de vidas” y ese espacio, que ya tiene dos años, porque comenzó en el años 2005, ha tenido continuidad en el tiempo de esa publicación. De una preocupación personal, muy propia, y de un momento especifico surgió este texto que ha tenido dos vertientes: una de alcance nacional y otra de alcance comunitario como son las historias de vida.
-¿Qué hicieron los portugueses en los últimos 60 años?
-La inmigración comenzó a llegar hacia 1948 y la mayoría se dedicó al comercio al detal para garantizar su sobrevivencia, pero muy pronto la comunidad comenzó a diversificarse y ahora la mayoría esta enrumbada hacia la pequeña y mediana industria, sobre todo en el sector de las manufacturas. Es decir que en menos de 20 años dejaron los abastos y pasaron a otros niveles tan importantes.
-¿Cómo son esas historias de vida de la comunidad portuguesa?
-Mi libro compila 234 historias de vida y entrevistas que realice yo solo. Esa es la medula de la publicación y además hace parte de mi tesis doctoral, la cual reposa en la biblioteca de la UCV. Algunas de las historias y las entrevistas se realizaron en 30 minutos, en unos casos, pero en ocasiones se consumieron hasta cuatro horas. Lo importante de las historias de vida es que la gente abrió las puertas de su casa, sus mentes, sus corazones. Incluso me revelaron secretos íntimos. Finalmente, expresó que este libro debe ser leído por todos aquellos venezolanos que quieran marcharse al extranjero, porque deben conocer como explotar sus capacidades personales fuera de su país y en un medio extraño. ”Deben conocer realmente esta historia, el ejemplo que tenemos de las comunidades inmigrantes en Venezuela. Quien quiera saber como sacarle provecho al ambiente en que ha sido creado, las relaciones , lo que es llevarse a la cabeza el contexto sociológico venezolano y recrearlos en otro pais y no sentirse desvenezolanizado tiene que leer este libro, para entender como funciona la relación social fuera del país de origen”.