Regresa a la patria para intervenir en los festivales internacionales de Oriente y de Caracas, los cuales organizan Kiddio España y Julio Bouley bajo los auspicios del Ministerio Popular de la Cultura. Es Luis “Wicho” Garván y su grupo El Globo Teatro quienes presentarán la exitosa pieza Chat, del también venezolano Gustavo Ott, la cual estrenaron en Madrid, recientemente.
Elenco y agenda
A Luis “Wicho” Garván lo acompañan: Germán Varone, Luciana Conti, Cecilia Murillo, Lisandro Caligaris, Javier Garban, Ana Castellanos y Gaia Vezzosi. La tropa de El Globo Teatro.
Las funciones están programadas así: Teatro Simón Bolívar en Margarita (16 y 17 octubre). Festival de Oriente en Barcelona (20 y 21 octubre). Casa de la Cultura en Maturín (22 octubre). Teatro Alfredo Sadel en Cantaura (23 octubre). Centro Cultural Español en El Tigre (24 octubre). Teatro Ateneo de Maracay (29 y 30 octubre) y Valencia (31 de octubre). Inauguran el Festival Escena Internacional Caracas 2010 del 4 al 7 de Noviembre.
Media vida afuera
“Wicho” informa que salió de Venezuela en 1989 con una beca para estudiar en Italia y de eso hace 20 años ya. “El Globo Teatro se funda en 1995. Llevo un poco menos de la mitad de mi vida fuera, bregando y haciendo el teatro que siempre soñé hacer. Creo que he conseguido mi camino en el teatro, mi forma de hacer, concebir de una manera propia y que eso sea una característica que distinga a El Globo Teatro. Hacemos un teatro de interés social, contemporáneo y de discursos arriesgados en el fondo y en la forma. Un teatro de texto que prioriza sobre el trabajo del actor, pero también un teatro completo, que explora sobre todas las herramientas semióticas que te ofrece este arte, así como con la puesta en escena, que siendo fiel a la naturaleza del drama, debe ser concebida con un riguroso carácter estético que atrape también desde la poética y la belleza. Poesía hecha carne, como dijera Lorca
“Siempre he pensado, como director, que se debe hacer teatro de arte, teatro espectáculo y a la vez conseguir que tus actores realicen un trabajo actoral creativo, emotivo, de búsqueda constante. Al menos esa debe ser la energía que nos impulsa hacia ese objetivo. Esto es lo maravilloso. Saber que cuentas con un equipo que dará todo por su oficio, porque está enamorado, abducido por la magia del teatro. Al menos esa es la misión, mi reto constante como director. Aunque no en todas las ocasiones es todo tan maravilloso como uno lo cuenta”.
-¿Cómo llegó esa pieza de Ott a sus manos?
-Siempre que voy hacer un montaje, me tomo un tiempo para leer muchas obras. Siempre giran en mi cabeza diversas ideas de lo que me gustaría hacer y no solo de lo que me gustaría, sino también de lo debería hacer El Globo Teatro. En ese proceso cayó Chat en mis manos. En la primera lectura me sentí atraído por su temática y su complejidad escénica. Intuía que había mucho drama, mucha sinceridad en las historias de estás víctimas. Como en todos los textos bien escritos que uno lee, me identifiqué con la obra desde el primer momento, me enamoró y caí en su red. Chat es una tragedia contemporánea maravillosa. Son historias reales conocidas por todos y de aplastante actualidad, tanto, que son hechos que se suceden todos los días de forma virtual y real, pero… está compuesta y concebida literariamente dentro de una estructura con muchos cambios espaciales y temporales. Una obra de estilo y tremendamente complicada, pero maravillosa de hacer. Un reto para cualquier director y cualquier actor. Chat es uno de esos textos donde no hay términos medios, o haces una cagada o te montas una tremenda obra, pero no se permite la mediocridad escénica. Esa es la grandeza de este texto de Ott. Bueno él la llama su hija predilecta. Yo la llamo mi joyita adorada.
-¿Cómo fue el proceso de montaje?
-Como en todos los procesos de El Globo Teatro, la primera pauta es enamorar a los actores y que estos se enamoren incondicionalmente del proyecto, a partir de allí, ya tienes un buen trecho ganado. Sabemos que el texto dramático no es teatro, es literatura y se convierte en teatro cuando se realiza, cuando se hace carne y cobra vida escénica. No solemos estar mucho tiempo de lecturas, sólo lo suficiente para que los actores descifren toda la información posible del texto y de su personaje. Quien es, que quiere, que siente, cuales son sus objetivos, circunstancias y conflictos, hasta definir una entidad dramática que se relaciona con otras vidas de la historia y que tiene su fin dentro de la globalidad de la historia que se cuenta.
Acto de amor
“Después de este proceso que no debe durar más de 12 sesiones largas de lecturas, comenzamos a trasladar toda esa información al cuerpo del actor en el proceso de ensayos. Es la práctica escénica, desde lo físico, desde donde debe apuntalarse la búsqueda. El lenguaje del cuerpo, la voz, el movimiento, cómo se siente y que energía lo mueve, como se comporta... Todos estos elementos son esenciales para definir el carácter y construir el personaje. Lo que se llama análisis activo del personaje. Es lo que rescatamos del método de Stanislavski y lo único que nos interesa, lo demás es bazofia y pura paja mental. Para los actores fue un trabajo durísimo, se tuvieron que comer sesiones de diez y doce horas en pleno invierno. Tenían que desprenderse de ellos mismos, alejarse para poder entrar en la vida de los personajes y sus misterios. Todos los actores hacen varios personajes y el reto era diferenciarlos al máximo, componer desde adentro, desde las emociones cada uno de ellos, y para esto se necesita mucha entrega y amor por lo que se hace. Un trabajo de mucha entrega, sinceridad, verosimilitud y la convicción absoluta de que la prioridad es la empatía con el espectador, conmover, conmover y conmover. Como decía Giménez: el teatro es un acto de amor”.
-¿Cuándo se estrenó y que pasó con el público y la crítica?
-Chat se estrenó en Madrid el 23 de febrero del 2010. El público quedaba muy tocado con la obra, mucha tensión en el patio de butacas también, pero salía encantado, agradecido de ver buen teatro. Las críticas en general son muy buenas. Debo decir que Chat entra a formar parte de esos espectáculos que me han dejado mucho, quizá sea uno de mis más queridos trabajos realizados. Pero bueno…nunca se sabe, a lo mejor en Venezuela no guste.Pero independientemente de que guste o no, Chat no te dejará impasible y eso es lo verdaderamente importante. No se hace teatro para que le guste a todo el mundo. Eso sería aburridísimo.
-¿Cuál es su lectura o su visión del montaje?
-Desde su fundación, El Globo Teatro, en la mayoría de ocasiones, ha trabajado sobre ideas propias escritas por autores invitados o versiones de grandes textos, una formula que nos a dado grandes resultados. Esa ha sido la dinámica, pero en el caso de Chat decidimos hacer la obra íntegra, tal cual la escribió Ott. Primero que nada sacamos como conclusión que había que hacer un teatro estrictamente realista en su discurso actoral, con mucha verdad, muy shakesperiano, sin cartones, ni artilugios. Verdad al desnudo, carne y razón que desvelan lo más profundo de los sentimientos humanos. Se trata de personas corrientes, mujeres y hombres normales envueltos en situaciones trágicas, donde todos los personajes acaban destruidos.
“Es una tragedia y para conseguir esa energía, esa fuerza dramática del espejo de la tragedia había que actuarla al límite entre la realidad desesperada del drama, de la ficción y la naturaleza humana de la vida real, conseguir momentos de enajenación muy consiente, muy controlado, inducidos por el trabajo. En este sentido, Chat se convierte en un nuevo elemento de búsqueda, un nuevo reto que se debe traducir en un gran salto adelante en las capacidades expresivas e interpretativas de El Globo”.
“Por otro lado en nuestra obra todo sucede dentro de la Red, los personajes no están en sus casas, no, están dentro de la Red. Navegan a la vista de otros navegantes, se cruzan, se encuentran, se chocan y se comunican por Internet y la Red nos trasmite en directo y virtualmente todos esos acontecimientos donde sus protagonistas nos muestran una parte de lo que somos capaces de hacer, seducidos por la idea de trascender. Chat es una obra tan actual que parece virtual, toca temas y personajes inspirados en la vida real, casos que siguen conmocionando al mundo, dramas que el público conoce y teme. Entonces hay que tocarle esa fibra y para eso hay que estar al límite de la vivencia de la tragedia y de la ficción. Nuestro discurso se introduce en las entrañas de la bestia, estamos dentro de la Red. Cámaras en directo muestran imágenes de una lágrima de la víctima en el cuerpo prestado del actor, nos muestran en detalle el gesto del rostro henchido de ilusión que el espectador mira como testigo silencioso sin saber si está justo aquí, en el teatro o como quien fisgonea por la ventana de su ordenador”.
“Nos introducimos en las nuevas tecnologías de la imagen como herramienta semiótica del discurso escénico, que refuerza la idea global, es el ojo de la bestia que observa y trasmite la información en gigante, deformada como la tragedia. La acción sucede en el escenario a la vez que en la pantalla, y estos elementos forman parte de la poética del montaje también, intentando hacer la tragedia más palmaria, atractiva y digerible al espectador, sin concesiones complacientes desde luego. Utilizamos la imagen para acercarle al espectador ese gesto que en la distancia no se percibe, como quien está mirando a través de un microscopio. Eso es un reto para el actor también. Llegar a la esencia física y emotiva del drama para producir reacciones en el patio de butacas, introducir al público dentro de esa angustia de las almas que conviven en el Chat”.
-¿Qué se puede hacer para controlar a ese monstruo de la Web ?
-La Red es una puerta abierta al mundo y al conocimiento, pero también nos ofrece acceso directo a los rincones más oscuros del ser humano, sin salir siquiera de nuestra casa. Con un simple movimiento del ratón tenemos todo a nuestro alcance y con otro podemos perderlo todo. Internet es el reflejo de una sociedad invadida hasta la intimidad más oscura y secreta soledad. Creo que Internet es la herramienta comunicativa más plural y democrática que existe, por tanto debe seguir existiendo por el bien de la humanidad. El control lo deben ejercer sus usuarios, procurando un uso responsable. Depende de nosotros hacer de su uso una ventaja para el conocimiento y la información, o un arma de destrucción.
“¿Te imaginas a este mundo de injusticias, de mentiras mediáticas, de manipulación de las masas sin Internet? Estaríamos más idiotizados y manipulados de lo que estamos. Gracias a la Red, podemos sacar nuestras propias conclusiones de lo que acontece en la vida política, social, cultural, económica etcétera. Pero como nada es perfecto también nos ofrece mucha mierda y sobre todo mucho engaño y maldad. Depende de nosotros utilizar los filtros adecuados y también limpiarlos de vez en cuando”.
-¿Por qué y para qué vienen a Venezuela?
-La primera vez que estuvimos en Venezuela fue en el marco del desaparecido Festival Internacional de Caracas en 1996. Apenas teníamos un añito de fundados y asumimos el reto. Posteriormente en 2002 estuvimos en el Festival Internacional de Teatro de Valencia y el Festival de Oriente en Barcelona. Ahora, después de 8 años sin actuar en mi país vuelvo con Chat al Festival Internacional de Oriente y al Festival Escena Internacional Caracas 2010, además de una extensa gira por 8 ciudades venezolanas entre octubre y noviembre. ¿Por qué? Es curioso, desde hace ya unos cinco años estoy muy relacionado con Venezuela y todo lo que allí acontece. No se, es como al revés, mientras más tiempo pasa más cercano me siento a mi tierra. He estado haciendo talleres en mi región, Anzoátegui, he estado trabajando encerrado durante tres meses en la selva, colaborando con la comunidad indígena Pemón en Canaima, proponiendo ideas, proyectos o sea que me siento muy cercano a mi gente. Estoy muy feliz de mostrar este trabajo, gracias al apoyo de mis colegas en Margarita, Barcelona, Maturín, Cantaura, El Tigre, Maracay, Valencia, Caracas. Es bueno saber que allí hay gente amiga, colegas que te aprecian y respetan mi trabajo y también muchos que no te desean cosas buenas jejejeje, pero eso me tiene sin cuidado.
-¿Qué planes tienen con la obra?
-Por ahora centrarnos en esta gira maravillosa por mi Venezuela querida. Posteriormente estaremos trabajando por una gira a Roma, Turín y Praga. Festival de El Cairo en Egipto, Argentina y Brasil. Ese es nuestro futuro internacional para 2011 si la crisis nos lo permite.
-¿Que otro texto esta avizorando para subirlo a escena?
Elenco y agenda
A Luis “Wicho” Garván lo acompañan: Germán Varone, Luciana Conti, Cecilia Murillo, Lisandro Caligaris, Javier Garban, Ana Castellanos y Gaia Vezzosi. La tropa de El Globo Teatro.
Las funciones están programadas así: Teatro Simón Bolívar en Margarita (16 y 17 octubre). Festival de Oriente en Barcelona (20 y 21 octubre). Casa de la Cultura en Maturín (22 octubre). Teatro Alfredo Sadel en Cantaura (23 octubre). Centro Cultural Español en El Tigre (24 octubre). Teatro Ateneo de Maracay (29 y 30 octubre) y Valencia (31 de octubre). Inauguran el Festival Escena Internacional Caracas 2010 del 4 al 7 de Noviembre.
Media vida afuera
“Wicho” informa que salió de Venezuela en 1989 con una beca para estudiar en Italia y de eso hace 20 años ya. “El Globo Teatro se funda en 1995. Llevo un poco menos de la mitad de mi vida fuera, bregando y haciendo el teatro que siempre soñé hacer. Creo que he conseguido mi camino en el teatro, mi forma de hacer, concebir de una manera propia y que eso sea una característica que distinga a El Globo Teatro. Hacemos un teatro de interés social, contemporáneo y de discursos arriesgados en el fondo y en la forma. Un teatro de texto que prioriza sobre el trabajo del actor, pero también un teatro completo, que explora sobre todas las herramientas semióticas que te ofrece este arte, así como con la puesta en escena, que siendo fiel a la naturaleza del drama, debe ser concebida con un riguroso carácter estético que atrape también desde la poética y la belleza. Poesía hecha carne, como dijera Lorca
“Siempre he pensado, como director, que se debe hacer teatro de arte, teatro espectáculo y a la vez conseguir que tus actores realicen un trabajo actoral creativo, emotivo, de búsqueda constante. Al menos esa debe ser la energía que nos impulsa hacia ese objetivo. Esto es lo maravilloso. Saber que cuentas con un equipo que dará todo por su oficio, porque está enamorado, abducido por la magia del teatro. Al menos esa es la misión, mi reto constante como director. Aunque no en todas las ocasiones es todo tan maravilloso como uno lo cuenta”.
-¿Cómo llegó esa pieza de Ott a sus manos?
-Siempre que voy hacer un montaje, me tomo un tiempo para leer muchas obras. Siempre giran en mi cabeza diversas ideas de lo que me gustaría hacer y no solo de lo que me gustaría, sino también de lo debería hacer El Globo Teatro. En ese proceso cayó Chat en mis manos. En la primera lectura me sentí atraído por su temática y su complejidad escénica. Intuía que había mucho drama, mucha sinceridad en las historias de estás víctimas. Como en todos los textos bien escritos que uno lee, me identifiqué con la obra desde el primer momento, me enamoró y caí en su red. Chat es una tragedia contemporánea maravillosa. Son historias reales conocidas por todos y de aplastante actualidad, tanto, que son hechos que se suceden todos los días de forma virtual y real, pero… está compuesta y concebida literariamente dentro de una estructura con muchos cambios espaciales y temporales. Una obra de estilo y tremendamente complicada, pero maravillosa de hacer. Un reto para cualquier director y cualquier actor. Chat es uno de esos textos donde no hay términos medios, o haces una cagada o te montas una tremenda obra, pero no se permite la mediocridad escénica. Esa es la grandeza de este texto de Ott. Bueno él la llama su hija predilecta. Yo la llamo mi joyita adorada.
-¿Cómo fue el proceso de montaje?
-Como en todos los procesos de El Globo Teatro, la primera pauta es enamorar a los actores y que estos se enamoren incondicionalmente del proyecto, a partir de allí, ya tienes un buen trecho ganado. Sabemos que el texto dramático no es teatro, es literatura y se convierte en teatro cuando se realiza, cuando se hace carne y cobra vida escénica. No solemos estar mucho tiempo de lecturas, sólo lo suficiente para que los actores descifren toda la información posible del texto y de su personaje. Quien es, que quiere, que siente, cuales son sus objetivos, circunstancias y conflictos, hasta definir una entidad dramática que se relaciona con otras vidas de la historia y que tiene su fin dentro de la globalidad de la historia que se cuenta.
Acto de amor
“Después de este proceso que no debe durar más de 12 sesiones largas de lecturas, comenzamos a trasladar toda esa información al cuerpo del actor en el proceso de ensayos. Es la práctica escénica, desde lo físico, desde donde debe apuntalarse la búsqueda. El lenguaje del cuerpo, la voz, el movimiento, cómo se siente y que energía lo mueve, como se comporta... Todos estos elementos son esenciales para definir el carácter y construir el personaje. Lo que se llama análisis activo del personaje. Es lo que rescatamos del método de Stanislavski y lo único que nos interesa, lo demás es bazofia y pura paja mental. Para los actores fue un trabajo durísimo, se tuvieron que comer sesiones de diez y doce horas en pleno invierno. Tenían que desprenderse de ellos mismos, alejarse para poder entrar en la vida de los personajes y sus misterios. Todos los actores hacen varios personajes y el reto era diferenciarlos al máximo, componer desde adentro, desde las emociones cada uno de ellos, y para esto se necesita mucha entrega y amor por lo que se hace. Un trabajo de mucha entrega, sinceridad, verosimilitud y la convicción absoluta de que la prioridad es la empatía con el espectador, conmover, conmover y conmover. Como decía Giménez: el teatro es un acto de amor”.
-¿Cuándo se estrenó y que pasó con el público y la crítica?
-Chat se estrenó en Madrid el 23 de febrero del 2010. El público quedaba muy tocado con la obra, mucha tensión en el patio de butacas también, pero salía encantado, agradecido de ver buen teatro. Las críticas en general son muy buenas. Debo decir que Chat entra a formar parte de esos espectáculos que me han dejado mucho, quizá sea uno de mis más queridos trabajos realizados. Pero bueno…nunca se sabe, a lo mejor en Venezuela no guste.Pero independientemente de que guste o no, Chat no te dejará impasible y eso es lo verdaderamente importante. No se hace teatro para que le guste a todo el mundo. Eso sería aburridísimo.
-¿Cuál es su lectura o su visión del montaje?
-Desde su fundación, El Globo Teatro, en la mayoría de ocasiones, ha trabajado sobre ideas propias escritas por autores invitados o versiones de grandes textos, una formula que nos a dado grandes resultados. Esa ha sido la dinámica, pero en el caso de Chat decidimos hacer la obra íntegra, tal cual la escribió Ott. Primero que nada sacamos como conclusión que había que hacer un teatro estrictamente realista en su discurso actoral, con mucha verdad, muy shakesperiano, sin cartones, ni artilugios. Verdad al desnudo, carne y razón que desvelan lo más profundo de los sentimientos humanos. Se trata de personas corrientes, mujeres y hombres normales envueltos en situaciones trágicas, donde todos los personajes acaban destruidos.
“Es una tragedia y para conseguir esa energía, esa fuerza dramática del espejo de la tragedia había que actuarla al límite entre la realidad desesperada del drama, de la ficción y la naturaleza humana de la vida real, conseguir momentos de enajenación muy consiente, muy controlado, inducidos por el trabajo. En este sentido, Chat se convierte en un nuevo elemento de búsqueda, un nuevo reto que se debe traducir en un gran salto adelante en las capacidades expresivas e interpretativas de El Globo”.
“Por otro lado en nuestra obra todo sucede dentro de la Red, los personajes no están en sus casas, no, están dentro de la Red. Navegan a la vista de otros navegantes, se cruzan, se encuentran, se chocan y se comunican por Internet y la Red nos trasmite en directo y virtualmente todos esos acontecimientos donde sus protagonistas nos muestran una parte de lo que somos capaces de hacer, seducidos por la idea de trascender. Chat es una obra tan actual que parece virtual, toca temas y personajes inspirados en la vida real, casos que siguen conmocionando al mundo, dramas que el público conoce y teme. Entonces hay que tocarle esa fibra y para eso hay que estar al límite de la vivencia de la tragedia y de la ficción. Nuestro discurso se introduce en las entrañas de la bestia, estamos dentro de la Red. Cámaras en directo muestran imágenes de una lágrima de la víctima en el cuerpo prestado del actor, nos muestran en detalle el gesto del rostro henchido de ilusión que el espectador mira como testigo silencioso sin saber si está justo aquí, en el teatro o como quien fisgonea por la ventana de su ordenador”.
“Nos introducimos en las nuevas tecnologías de la imagen como herramienta semiótica del discurso escénico, que refuerza la idea global, es el ojo de la bestia que observa y trasmite la información en gigante, deformada como la tragedia. La acción sucede en el escenario a la vez que en la pantalla, y estos elementos forman parte de la poética del montaje también, intentando hacer la tragedia más palmaria, atractiva y digerible al espectador, sin concesiones complacientes desde luego. Utilizamos la imagen para acercarle al espectador ese gesto que en la distancia no se percibe, como quien está mirando a través de un microscopio. Eso es un reto para el actor también. Llegar a la esencia física y emotiva del drama para producir reacciones en el patio de butacas, introducir al público dentro de esa angustia de las almas que conviven en el Chat”.
-¿Qué se puede hacer para controlar a ese monstruo de la Web ?
-La Red es una puerta abierta al mundo y al conocimiento, pero también nos ofrece acceso directo a los rincones más oscuros del ser humano, sin salir siquiera de nuestra casa. Con un simple movimiento del ratón tenemos todo a nuestro alcance y con otro podemos perderlo todo. Internet es el reflejo de una sociedad invadida hasta la intimidad más oscura y secreta soledad. Creo que Internet es la herramienta comunicativa más plural y democrática que existe, por tanto debe seguir existiendo por el bien de la humanidad. El control lo deben ejercer sus usuarios, procurando un uso responsable. Depende de nosotros hacer de su uso una ventaja para el conocimiento y la información, o un arma de destrucción.
“¿Te imaginas a este mundo de injusticias, de mentiras mediáticas, de manipulación de las masas sin Internet? Estaríamos más idiotizados y manipulados de lo que estamos. Gracias a la Red, podemos sacar nuestras propias conclusiones de lo que acontece en la vida política, social, cultural, económica etcétera. Pero como nada es perfecto también nos ofrece mucha mierda y sobre todo mucho engaño y maldad. Depende de nosotros utilizar los filtros adecuados y también limpiarlos de vez en cuando”.
-¿Por qué y para qué vienen a Venezuela?
-La primera vez que estuvimos en Venezuela fue en el marco del desaparecido Festival Internacional de Caracas en 1996. Apenas teníamos un añito de fundados y asumimos el reto. Posteriormente en 2002 estuvimos en el Festival Internacional de Teatro de Valencia y el Festival de Oriente en Barcelona. Ahora, después de 8 años sin actuar en mi país vuelvo con Chat al Festival Internacional de Oriente y al Festival Escena Internacional Caracas 2010, además de una extensa gira por 8 ciudades venezolanas entre octubre y noviembre. ¿Por qué? Es curioso, desde hace ya unos cinco años estoy muy relacionado con Venezuela y todo lo que allí acontece. No se, es como al revés, mientras más tiempo pasa más cercano me siento a mi tierra. He estado haciendo talleres en mi región, Anzoátegui, he estado trabajando encerrado durante tres meses en la selva, colaborando con la comunidad indígena Pemón en Canaima, proponiendo ideas, proyectos o sea que me siento muy cercano a mi gente. Estoy muy feliz de mostrar este trabajo, gracias al apoyo de mis colegas en Margarita, Barcelona, Maturín, Cantaura, El Tigre, Maracay, Valencia, Caracas. Es bueno saber que allí hay gente amiga, colegas que te aprecian y respetan mi trabajo y también muchos que no te desean cosas buenas jejejeje, pero eso me tiene sin cuidado.
-¿Qué planes tienen con la obra?
-Por ahora centrarnos en esta gira maravillosa por mi Venezuela querida. Posteriormente estaremos trabajando por una gira a Roma, Turín y Praga. Festival de El Cairo en Egipto, Argentina y Brasil. Ese es nuestro futuro internacional para 2011 si la crisis nos lo permite.
-¿Que otro texto esta avizorando para subirlo a escena?
-Ufff. Tengo en mi cabeza muchas cosas, desde un Fausto, La Tempestad, pero también estoy pensando en una obra que se ha hecho en Venezuela, una idea de Carlos Giménez y que dejó en manos del Centro de Directores, creo que se llamó Fango negro. Esa idea surgió en mi estancia en Rajatabla y fue un texto que mando hacer Carlos y se lo cedió a Daniel Uribe. Nosotros tomaríamos la idea primogénita de Carlos Giménez. Rescribiríamos un nuevo texto basado en esa idea, pero no está nada claro aun. Por otro lado hay por allí una invitación para dirigir en Venezuela un nuevo texto inédito de un autor venezolano de mucho prestigio, pero no voy hablar de eso porque tampoco es una formalidad, es un texto que ya he leído y me parece excelente y muy atractivo para mí. Por ahora toda mi energía está centrada en Chat. No hacemos teatro como quien hace churros. Hacemos una obra por año y si la obra tiene muchos compromisos a veces hasta un año y medio después de la anterior. Así que con calma y a disfrutar de esta que tenemos en repertorio y si es en Venezuela, mejor. Esta gira es una realidad gracias también al aporte de la Conserjería de Cultura de la Embajada de España en Venezuela y la Agencia Española de Cooperación Internacional y Ayuda al Desarrollo. Y a la invitación de Kiddio España y Julio Bouley del IAEM
No hay comentarios.:
Publicar un comentario