jueves, enero 31, 2019

Febrero es para el teatro venezolano

Actores y títeres en escena.

Fue el gran portaaviones del teatro criollo durante la segunda parte del siglo XX , especialmente por la creación y funcionamiento de El Nuevo Grupo, además de la activa presencia del grupo Theja, y ahora el Teatro Alberto de Paz y Mateos se ha convertido en la sede artística de la Compañía Nacional de Teatro, el cual inicia su programación durante el mes de febrero.
La primera propuesta en subir a escena está a cargo del Colectivo Cultural AMAKÁ, se trata del espectáculo El Circo Roto, idea original y dirección de Marcela Lunar, escrita por Oriana Orozco. Esta es una obra que se arma de la realidad que viven las mujeres venezolanas y del mundo en torno a la violencia que se revela y moviliza a través de cantos, danza, teatro y sensaciones vivas que nos hacen reflexionar acerca de las experiencias tangibles, de historias reales que son minimizadas, silenciadas y naturalizadas por nuestra sociedad. Las presentaciones serán del 01 al 10 de febrero, viernes, sábados y domingos a las 4 pm.
Seguidamente del viernes 15 al domingo 17 de febrero le corresponde subir a la agrupación Actividades Alternas con la obra  Rosa de papel, escrita y dirigida por José Luis León.  Una propuesta escénica que utiliza el teatro de actores y objetos, mostrando el mundo y la sociedad a través de la mirada de una niña. En Rosa de papel, los personajes realizan su propia transformación y deformación convirtiéndose en un acto de crítica, donde la noción del mundo se viene abajo y en su lugar encontraremos la pérdida de la identidad, la distorsión de las normas y la destrucción de la personalidad. En Rosa de papel actúan: Ariana León, María Alejandra Jiménez y Jennifer Morales, la realización de la muñequería está a cargo de Noelia Rojas y Rubén León, realización de Vestuario Juan Carlos Llanos, iluminación Gerónimo Reyes y en la producción general de Laura Meza Rada.
Finaliza la programación con el espectáculo experimental de teatro sensorial Hijos del fuego...barro y neblina, ambiciosa propuesta que a finales del año 2018 estrenó la Compañía Nacional de Teatro, Núcleo Estado Miranda, bajo la dirección de Moisés Mirele, quien expresó: “La obra surge como resultado de un trabajo dramatúrgico denominado Proyecto García, donde se recopilan y fusionan textos de Federico García Lorca, Gabriel García Márquez y Luis Britto García”. La propuesta combina danza-teatro, teatro sensorial, teatro ciego y música en vivo, en torno a un formato experimental.   Se presentará del jueves 21 al domingo 24 de febrero, a las 4:00 pm.
Las entradas para todos estos espectáculos estarán a la venta en las taquillas del Teatro Alberto de Paz y Mateos, ubicado entre la Av. La Colina y la Av. Andrés Bello, en la Prolongación Los Manolos. Urbanización Las Palmas, metro Plaza Venezuela, conexión Metrobus Nº 314.


miércoles, enero 30, 2019

Cucarachas y Primavera en Festival de Jóvenes Directores


El Quinto Festival de Jóvenes Directores Trasnocho avanza con la positiva convocatoria de una audiencia atraída por la publicidad centrada en las dramaturgias elegidas y porque se trata de una única, auténtica y desesperada alternativa artística, apuntalada en la aguerrida juventud de sus participantes. Este país es siempre un baúl de gratas sorpresas y lo demuestra la existencia y permanencia de este evento convocado y organizado por el sector artístico privado que se abstrae del complejo contexto exterior y hace una muestra de respetable teatro para divertir y pensar.
Ya han sido presentados, durante dos fines de semana del pasado mes de enero en El Espacio Plural, los espectáculos Cucarachas de Cristian Cortez (Ecuador, 1972) y Prohibido suicidarse en primavera de Alejandro Casona (España, 1903/1965), bien dirigidos por los jóvenes Jeizer Ruiz y Jorge Roig Graterol, respectivamente, a quienes habrá que seguirles la pista porque ahora hasta ahora demostraron mucha pasión y cultivados talentos materializados en sus trabajos. El futuro de ellos y de todos los participantes se construye con estudios e investigaciones y los necesarios soportes financieros, además de una comunidad comprometida con el desarrollo de esos nuevos poetas de la escena teatral, como ha sido durante las últimas décadas, de las cuales somos testigos.
Este evento, valioso proyecto  de la Fundación Trasnocho Cultural que busca la profesionalización de una generación de artistas menores de 35 años, tiene programados otros seis montajes y ha  de culminar el venidero 10 de marzo, tras de exhibir las puestas en escena de Andreína Polidor con La misión de Heiner Müller (Alemania); Camila Rodríguez, Riñón de cerdo para el desconsuelo de Alejandro Ricaño (México); Edward Parúh, Nueve días de guerra en Facebook de Mario Moncada (México); José Dávila, Largo viaje hacia la noche de Eugene O'Neill (EEUU); Leo Mendoza, La máxima felicidad de Isaac Chocrón (Venezuela); y Martín Dávila, Esperando al zurdo de Clifford Odets (EEUU).
Hay que subrayar que los ocho directores del  Quinto Festival, quienes fueron elegidos por la calidad de los proyectos presentados a concurso, son los responsables financieros de las respectivas producciones y tienen únicamente seis presentaciones por montaje. Los dos ganadores de la competencia de este 2019, para lo cual hay un jurado ad hoc, podrán presentarse posteriormente en el Trasnocho y en el Centro Cultural Chacao, durante cuatro fines de semana. La historia, estamos seguros, registrará sus periplos. El futuro se construye día a día, gracias al público y la comunidad artística.
Vimos, pues, el pasado 26 de enero, los montajes que firmaron Ruiz y Roig. Quedamos muy satisfechos, no solo por la calidad de esos textos de un teatro contemporáneo que predican filosofías sensatas y algunos modos o maneras para afrontar el devenir existencial de hombres y mujeres, gracias a las dramaturgias de Cortez y Casona. Además la frescura de   las actuaciones demuestra que hay talento teatral emergente.
ECUADOR
Cortez con su Cucarachas (2010) propone un comprometido valiente y bien estructurado texto de denuncia sobre las peripecias de la inmigración latinoamericana en Estados Unidos de América, la cual en este montaje se centra o corporiza con tres jóvenes venezolanos quienes habitan en un sórdido sótano de un edificio de Nueva York, durante una nevada, entregados a la difícil sobrevivencia por la precariedad económica en que viven. Ahí actúan Ignacio Marchena, Ricardo Lira, Leandro Campos, quienes encarnan a Walter (un travesti portador de Sida), su cainítico y homofóbico hermano John, y Billey, un amigo que dejó en Caracas a su paraje y su hijita. Hacemos hincapié en las depuradas y convincentes performances de estos comediantes. Ellos encarnan a un enfermo que ya no convence con su imitación de la diva Maria Feliz, a un jovenzuelo inmoral y capaz de denunciar a su hermano porque no tiene documentos legales de inmigración y además quiere cobrar una supuesta recompensa, y un desesperado músico empeñado en triunfar para poder mantener a su familia que se ha quedado en Venezuela.
Un verdadero golpe al estómago y un pellizco en el corazón es lo que deja este montaje, realizado con veloz ritmo escénico, sin afectar la dicción y con satisfactorias caracterizaciones. Es un espectáculo, de unos 80 minutos de duración con mínimos recursos escenográficos, muy oportuno para los tiempos de inmigración que han asumido algunos valientes venezolanos, a pesar de que allende las fronteras los consideren unas “cucarachas” y tratan de “aplastarlas”
ESPAÑA
Hemos perdido la cuenta de las versiones vistas de Prohibido suicidarse en primavera, que no es más que una alocada comedia donde existe un establecimiento u hotel –“El hogar del suicida”- dedicado en facilitar el suicidio a la gente que se cansó de vivir o que ya no tiene razones para seguir existiendo. Es una comedia absurda y por ende divertida por las inverosímiles situaciones de sus personajes. Es un teatro que tiene éxito casi siempre que se presenta bien producido, como lo ha logrado Roig Graterol.
Pero de lo que si estamos seguros es que la versión y la dirección que logró Roig Graterol es la más audaz y contemporánea versión que nos han mostrado hasta ahora. Se trata de una pieza y un montaje que convierten en un delicioso canto a la vida y un rechazo a las soluciones fáciles que puede proporcionar un suicidio para no luchar, tal como lo concibió Casona, a quien le tocó vivir y soportar la oprobiosa dictadura del generalísimo Francisco Franco.
Roig Graterol consiguió y manejó un diestro elenco y con todos ellos realizó su montaje, cercano a los 90 minutos, en un bien diseñado y realizado dispositivo escenográfico, donde se muestra y se demuestra como a la vida hay que buscarle siempre una explicación o un motivo, donde no se puede vivir sin metas o compromisos, sin pretender con esto hacer una filosófica existencia.
A “El hogar del suicida”, peculiar lugar donde las almas en pena y los desesperados pueden ponerle fin a los tormentos de su vida, llegan accidentalmente dos periodistas que con su alegría y pasión por la vida transforman completamente los diferentes estados anímicos de los supuestos enfermos. Una serie de encuentros y desencuentros entre los personajes, que oscilan entre cómicos y dramáticos, permiten que se cumpla el principal y quizás único objetivo de la clínica: lograr que los enfermos se desentiendan de ese deseo de morir.
Roig Graterol, un periodista vinculado a la televisión caraqueña, quien debuta ahora en la dirección teatral con una pieza estrenada en 1937 que él mismo ha decidido adaptar para presentarla al público actual, logra dar vida a una siempre vigente comedia de enredos donde sus personajes emprenderán un viaje para reconocer que aún hasta para morir hace falta tener determinación y que esta, es mejor usarla para encontrar y aferrarnos a aquellas cosas que hacen que nuestra vida feliz.
“Esta es una obra que me ha acompañado desde que me inicié en el teatro cuando apenas estaba en el colegio y me propuse como reto el modernizar este clásico que por su mensaje sigue tan vigente como en el momento que se escribió” asegura Roig Graterol sobre su primera incursión en la dirección teatral
Protagonizada por elenco de lujo, este montaje divierte y hace reflexionar sobre como los problemas cotidianos a veces nos hacen olvidarnos de las cosas importantes de la vida, gracias además al lujoso elenco encabezado por Rafael Monsalve, Elvis Chaveinte, Claudia Rojas, Nakary Bazán, Francisco Aguana, Raoul Gutiérrez, Nerea Fernández, Erick Palacios y Beatriz Tícali.
No hay que olvidar que el Festival de Jóvenes Directores, creado y realizado por el Centro Cultural Trasnocho, durante los últimos cinco años, ha servido hasta ahora como plataforma para que jóvenes creadores puedan exponer sus inquietudes con sus puestas en escena novedosas que reflejan las intenciones de una urgente y necesaria generación emergente en el teatro venezolano.

martes, enero 29, 2019

Los inmigrantes de Rómulo Gallegos se hacen teatro en Guanare

Vinieron de Europa y del Oriente Medio.

La Compañía Nacional de Teatro inaugura su temporada 2019 con un montaje del núcleo Portuguesa, el 14 de febrero, a las 7 pm en la Sala Alberto Ravara del Centro Teatral de Occidente de Guanare, basado en el cuento Los inmigrantes de Rómulo Gallegos, nuestro escritor más emblemático y ex Presidente de la República, autor de la gran novela Doña Bárbara donde, precisamente, hace un fresco sobre la civilización y la barbarie presentes en la patria venezolana.
 Aníbal Grunn, Coordinador del Núcleo Portugueseño y además director del espectáculo, explica que Los inmigrantes, escrito y editado por primera vez en 1919, es la historia de dos extranjeros: un judío y un italiano, que se encuentran en una plaza caraqueña y comienzan a contarse sus vidas, sus momentos felices y sus desdichas, desde que llegaron a Venezuela. “Una hermosa historia, llena de esa gran maestría en la narración de Gallegos, con una vigencia absoluta. Una saga llena de amor, de burlas, de buenas noticias y de malos momentos. Una historias impregnada de nostalgia y con un profundo agradecimiento a esta tierra que supo cobijarlos y darles no sólo dinero, bienestar y trabajo, sino una familia”.
 Puntualiza Grunn que en aquel cuento de Gallegos, los hijos de los dos inmigrantes, nacidos ya en Venezuela, se casan y comienzan una nueva familia, esta vez de venezolanos que se arraigan aquí, con “la perspectiva optimista que nuestro gentilicio podía abrazar en aquellos años y que era la envidia de muchas naciones en desgracia”.
 Cuenta Grunn que el año pasado, durante las clases del Taller de Formación de la Compañía Regional de Portuguesa, “vimos dramaturgia y leímos el cuento con el objetivo de hacer una versión teatral, nada más. Dividimos la obra en escenas y a cada estudiante le correspondió dialogar una escena. Los escritores son: Jhessika Betancourt, Emili Valladares, Yonder Carrizalez, Sinait Lameda y Gabriel Jurado, gente joven que prometen mucha más piezas”.
 “Al final el producto nos gustó tanto que decidimos proponerle a la Compañía Nacional de Teatro, cuyo director general es Carlos Arroyo, coproducir el montaje. Aceptaron y comenzaron los ensayos. Hicimos un receso por el Festival de Teatro, en el mes de noviembre y al regreso de este año, retomamos los ensayos y la producción”.
 Los personajes de la versión teatral de Los inmigrantes son: Abraham (el judío), Doménico (el italiano), Domitila (esposa de Abraham), Franchesca (esposa de Doménico), Abraham (joven), Domitila (joven), Sara (hija de Abraham y Domitila), Samuel (hijo de Abraham y Domitila) Giácomo (hijo de Doménico y Franchesca), cuyos roles están resueltos   por Wilfredo Peraza, Giuseppe Fischetti, Mercy Mendoza, Carlos Moreno, Rosangélica Sánchez, Jhessika Betancourt, Sinait Lameda, Yonder Carrizalez y Gabriel Jurado.
 Aclara Grunn que él coordinó todo el trabajo de escritura así como la dirección general de la puesta en escena. ”La propuesta escénica, el vestuario, la iluminación y la música, también son producto de charlas, discusiones e investigación cada uno realizó. Teníamos una referencia de un video que se había hecho para televisión, pero ninguno lo vio hasta hace unos días, cuando ya la puesta estuvo terminada y nada podía contaminarnos La historia teatral, ubicada Caracas, transcurre en cinco épocas diferentes: 1925,1942, 1945,1950 y 1955”.
 Reconoce Grunn que la producción del Núcleo Portuguesa es de gran formato y que “la experiencia de escribir con estos muchachos fue maravillosa. Cada día descubríamos más cosas y siempre tuvimos en cuenta no traicionar al autor en su propuesta de conflicto. Además, lo difícil fue encontrar un mismo estilo todos, como así mismo mantener lo romántico y tan particular de la pluma de Gallegos. Sobre todo con muchachos cuyas edades oscilan entre los 14 y los 20 años. Es importante destacar que casi nadie conocía a Gallegos, por haberlo leído y mucho menos el cuento. Verlos emocionarse y hasta llorar con el final sorpresivo e inesperado, fue algo que nunca me podré olvidar”.




Una Rosa de papel para Rajatabla


La imaginación no tiene límites en la escena teatral y es por eso que la agrupación Actividades Alternas presenta  en la sala Rajatabla, desde el viernes 1 al domingo 10 de febrero, siempre a las 5PM, su espectáculo Rosa de papel de José Luis León, una creativa propuesta escénica que utiliza el teatro de actores y objetos, mostrando el mundo y la sociedad a través de la mirada de una niña.  
En Rosa de papel, según cuenta Jose Luis León los personajes realizan su propia transformación y deformación convirtiéndose en un singular acto de crítica, donde la noción del mundo se viene abajo y en su lugar encontraremos la pérdida de la identidad, la distorsión de las normas y la destrucción de la personalidad.
Mediante la utilización de diversas técnicas escénicas, la actuación, la danza y el teatro de muñecos, actividades alternas que dan vida a esta propuesta, donde Rosa (es un títere manipulado en técnica bunraku) narra su particular visión de nuestra sociedad y su participación en ella.  
Ahí actúan: Ariana León, María Alejandra Jiménez y Jennifer Morales; la realización de la muñequería está a cargo de Noelia Rojas y Rubén León, la realización de vestuario es de Juan Carlos Llanos, la iluminación está resuelta por Gerónimo Reyes, la dirección es de José Luis León y la producción general está a cargo de Laura Meza Rada.  


miércoles, enero 23, 2019

"Tócame" o los orgasmos inauguran temporada 2019

El orgasmo femenino tiene su teatro criollo.

  Gennys Pérez (Barquisimeto, 1968) vive con su hijo Néstor y ahora con su nieto Cristian Pérez en Ciudad de Mexico. Ella, dramaturga, y su unigénito migraron al país de los aztecas hace no menos de cinco años, y desde allá sueñan, porque “¿qué inmigrante no sueña todos los días con volver a su país? La experiencia de ser migrante, es fascinante, te abre los ojos, cambias de piel, te impone nuevos retos, la nostalgia te mata, pero la satisfacción es poder apoyar a tus familias, y eso se convierte en la prioridad”, puntualiza.
Trabaja como escritora desde que llegó a México. Muchos le dijeron que había que empezar de cero, “que hay que hacer de todo, la vida nos cambió…pero, sucedió, un día endemoniadamente difícil, y cuando había  caminado  muchísimos kilómetros para poder llegar a casa porque no tenía ni cinco pesos para pagar el transporte público, me eché a llorar en una acera, o banqueta como se dice aquí, y me juré que no iba a empezar de cero, que no iba hacer otra cosa, porque yo traía una vida, no la había perdido, sólo estaba extraviada, adolorida, deprimida, pero yo sabía un oficio que amaba, y me esmero y esfuerzo mucho por hacerlo lo mejor que puedo, así que ese día me juré vivir de lo único que sé hacer: escribir”.
Cuenta que “los venezolanos estamos aprendiendo a migrar. Sólo sabíamos ser turistas del mundo. Así, que somos una comunidad de principiantes, cometiendo algunos errores, pero con mucha disposición de hacerlo lo mejor posible. Tengo amigos venezolanos extraordinarios, de una calidad humana abismal, emprendedora, respetuosa y agradecida con México. Nos vemos en las fechas fundamentales, cumpleaños y Navidad, porque todos trabajamos mucho, sino trabajas mucho, no puedes seguir como migrante. México ya es un país complejo para el propio mexicano, no es un país fácil, acá también hay muchos problemas sociales, así que debemos trabajar muy duro para estar a la altura del país que es muy exigente. La madre de mi nieto es una joven poetisa mexicana, Mariana, maravillosa mujer además”.
LOS ORGASMOS
Gennys Pérez es noticia ahora en Caracas porque en la Sala Rajatabla hacen una breve temporada con el espectáculo Tócame, basado en su pieza homónima, la cual ahora ha producido Gustavo Mendoza y se muestra, bajo la excelente dirección de Verónica Arellano, con las convincentes actuaciones de Margaret Aliendres, Rosa Paz de Laca y Sandra Moncada/Marta Paria. Un montaje, cuya temática y argumentación, abordan sendos casos peculiares de anorgasmia, que no es otra que la imposibilidad de sentir placer y alcanzar los orgasmos en sus relaciones sexuales, por lo cual los personajes Rosita y Charito acuden al consultorio de la sexóloga Graciela para ponerse en sus manos y superar ese “problemita” que les impide ser felices en sus relaciones íntimas.
La anorgasmia afecta a hembras y machos, y es “la ausencia de un clímax que produce una sensación de liberación repentina y placentera de la tensión acumulada desde el momento en que se inicia la fase de excitación. Es en ese momento en que se generan una serie de espasmos musculares intensos que resultan altamente agradables, a lo que ayuda la liberación de endorfinas que se produce de forma simultánea”.
Tócame es consecuencia de una seria investigación de Gennys Pérez sobre los orgasmos, femeninos en este caso, porque “mi dramaturgia es de verdad y no tiene nada que ver con lo que me pasa a mí, mi vida es como la de cualquier ser humano normal y corriente. No hago teatro por catarsis, no hago teatro por terapia. No escribo teatro por nada de eso. Me gusta el teatro de investigación sobre personajes  que nos metan en un conflicto moral y ético, en la devaluaciones de la sociedad, en la justicia, de cómo y por qué estaos haciendo las cosas .Ese el teatro que me llama la atención, un teatro de fuerza social, económica, que nos haga preguntarnos cosas”.
“Tócame fue la segunda obra que escribí, cuando vivía y hacia teatro en Maracay. Era un momento de búsqueda y experimentación. El tema central es la anorgasmia. Las mujeres dejamos de sentir placer sexual y nos parece "normal", cuando no lo es. El placer sexual en la mujer responde a muchas variantes, y aun hoy día hablar de la incapacidad de tener orgasmos sigue siendo un tabú, porque podemos fingirlos. Es la primera vez que se estrena. En Maracay hicimos una lectura dramatizada y luego Tócame quedó archivada. Me da mucho gusto que se estrene en Venezuela de la mano de una mujer de teatro como lo es Verónica Arellano, a quien respeto y admiro, y de la mano de Gustavo Mendoza que es mi amigo del alma. Acá en México quieren montarla y están en pláticas para producirla. Para mí es muy importante y esencial que se siga montando mi dramaturgia en mi país, me conmueve sobremanera y me hace inmensamente feliz, porque entiendo los esfuerzos sobrehumanos que se hacen para producir teatro en estos momentos tan complicados que vive nuestra Venezuela. Y muchas gracias por seguir promoviendo la crítica teatral, tan necesaria para crecer. Te mando mi cariño y te doy las gracias, mi amor”.
Con respecto a Tócame hay que destacar la precisión de su texto sobre  esa delicada temática, perfecto el lenguaje utilizado y las dos situaciones creadas: la de Rosita, una señora de 50 años, cuyo matrimonio ha caído en una rutina peligrosa y ella no siente placer alguno en sus relaciones íntimas; y la de Charito, una colombiana que se quiere casar ,mientras trabaja en  una agencia de citas sexuales telefónicas, pero tampoco es feliz como porque no se ha asumido definitivamente  en su conducta sexual, ya que es lesbiana y su placer es,  obviamente, con mujeres, y tampoco logra el orgasmo. Hasta que visita la sexóloga susodicha.
Tócame podría verse como otro batiburrillo de anécdotas eróticas, pero no es así. Es un respetable acercamiento a la anorgasmia, que afecta más a las mujeres pero que también les arruina la existencia erótica a los hombres.
 Aunque los fundamentos de la anorgasmia suelen esconderse detrás de causas psicológicas en la mayoría de los casos, también se pueden identificar determinadas razones o causas de origen fisiológico, pero ese no es el tema de esta crónica teatral, por ahora.
Las actuaciones de las tres mujeres ahí comprometidas son ejemplares y convencen en todo su desarrollo escénico y actoral Se trata, pues, de un espectáculo bastante entretenido y didácticos precisamente sobre algo de lo que no se habla en público, sino que se calla o se exhibe ahora en el teatro, gracias a la audacia y las hormonas de Gennys Pérez y el equipo artístico ahí presentes.
GALARDONES
Gennys Pérez, que escribe con calidad y por eso la premian, contabiliza algunos galardones, tales como: Premio Actors of the World de Dramaturgia en Londres (2010) con El fantasma de Hiroshima. Premio Nacional de Dramaturgia Innovadora (2006) con Yo soy Carlos Marx; Premio Monte Ávila Editores de Autores Inéditos para El secreto de la felicidad (2005); Premio Fundarte en poesía 2004 por el poemario Lunas Marginales (2004; Premio Dramaturgia La Fiesta de Caracas con De Libertadores a Libertados (2000); Premio de Teatro Regional de Maracay para La cuarta noche (2002), basada en El perseguidor de Julio Cortázar.

lunes, enero 21, 2019

Si esto es un hombre

Javier Vidal caracterizando al personaje del monólogo.

Como parte de la conmemoración In Memoriam 2019 de Espacio Anna Frank, se presentarán dos funciones gratuitas de la obra Si esto es un hombre, basada en el libro homónimo del escritor Primo Levi, la cual constituye una poderosa reflexión sobre la supervivencia humana, por intermedio de  la conmovedora interpretación de Javier Vidal, bajo la dirección de Julie Restifo, la cual tendrá como escenario el Centro Cultural Chacao el domingo 27 de enero, a las 11 a.m. y a las 4 p.m.
Si esto es un hombre relata las desgarradoras vivencias de su autor, el químico judeo-italiano Primo Levi, quien pasó 11 meses en el campo de concentración de Auschwitz en Polonia, durante la Segunda Guerra Mundial, siendo el suyo uno de los primeros relatos divulgados de un testigo directo del Holocausto. 
“Destruir al hombre es difícil, casi tanto como crearlo: no ha sido fácil, no ha sido breve, pero lo habéis conseguido, alemanes. Henos aquí, dóciles bajo vuestras miradas: de nuestra parte nada tenéis que temer: ni actos de rebeldía, ni palabras de desafío, ni siquiera una mirada que juzgue”, escribió Primo Levi en su relato profundo y estremecedor, que va más allá de narrar lo acontecido durante el Holocausto. Al respecto, precisó en su momento: “He usado el lenguaje mesurado y sobrio del testigo, no el lamentoso lenguaje de la víctima, ni el iracundo lenguaje del vengador: pensé que mi palabra resultaría tanto más creíble cuanto más objetiva y menos apasionada fuese”. Y con tal espíritu asume la misión de describir la naturaleza del ser humano, de los que someten a otros bajo su poder y autoridad degradándolos, y de los que tratan de sobrevivir enfrentándose a desgarradoras situaciones. El libro está escrito como si fuera el testimonio de un juicio, abundante en detalles; no se incluye allí nada que no fuera visto, experimentado en carne propia o sentido por el autor.
Javier Vidal cuenta que no dudó en aceptar la interpretación de este papel cuando Espacio Anna Frank se lo ofreció, debido a su trascendencia y a que nunca había hecho un monólogo. Entonces convino un “trueque” con su esposa, Julie Restifo, para que ella dirigiera la obra y él la interpretara. Si esto es un hombre  es una gran oportunidad para mi carrera, con el apoyo de Espacio Anna Frank”, afirmó el reconocido actor. “Es un trabajo sumamente reflexivo para mostrar lo que pasó en Auschwitz. Es difícil entender lo ocurrido; no se debe comprender, porque así llegamos a justificar lo sucedido. Ya que es imposible comprender, es inevitable, imprescindible, conocer. Porque lo que allí pasó puede volver a suceder: ese es el gran mensaje de esta pieza”.
Levi, oriundo del Piemonte, hijo de una familia judía (Turín, 1919-1987) se doctoró en Química en 1941. En 1943 fue detenido por la milicia fascista italiana y en febrero de 1944 llegó al campo de exterminio de Auschwitz, en Polonia. A partir de lo que presenció y vivió, en “Si esto es un hombre” describe en detalle la labor de los Kapos (custodios de los prisioneros) y su empleo de la violencia, así como la humillación, la degradación moral y la ausencia de solidaridad. Al final de su cautiverio, en enero de 1945, fue enviado a la enfermería por padecer escarlatina; allí pasó los últimos días como prisionero hasta su evacuación, poco antes de que el campo fuera liberado por las tropas del ejército soviético. Habida cuenta de esta atroz experiencia, uno de los temas de su obra es la fortaleza que el ser humano puede extraer incluso de sus momentos de mayor flaqueza.
“Contareis lo que pasa aquí y no os creerán”, escribió Levi, citando a los oficiales de las SS. La crueldad y la brutalidad de lo sucedido en Auschwitz superaba la comprensión y el asombro humano: el hambre, el frío, las enfermedades, el trabajo forzado, los castigos, el cansancio extremo, la lucha por la supervivencia, el horror, la injusticia, la maldad, las miserias físicas y morales, la muerte o la muerte en vida, todo se refleja en las vivencias de Levi, la degradación que puede alcanzar al hombre. Sin embargo, también se muestra el empeño que algunos pusieron en preservar su humanidad de esta hecatombe moral.
Si esto es un hombre debe su título, según Javier Vidal, “al grado de humillación y degradación humana que vivieron Primo Levi y todos los judíos que estaban en el campo de concentración de Auschwitz, enfrentados a las preguntas: ‘¿Soy un hombre? ¿Me están tratando como un hombre? ¿Es esto vivir?’, ya que allí había criminales y también políticos. Los criminales tenían el triángulo verde, los políticos, el rojo, y los judíos, la Estrella de David amarilla. Pero los judíos eran los esclavos de los esclavos. En un solo día eran asesinadas 25 mil personas”.
Hay una frase de Primo Levi que reza: “Quien lo ha perdido todo, fácilmente se pierde a sí mismo”. La situación constante de oprobio y sometimiento a la que se vieron expuestos los prisioneros en los campos de exterminio los lleva a perder la esperanza, y al perder la esperanza, se pierde todo, hasta lo humano. De allí precisamente el texto: ¿esto es realmente un hombre? ¿Esto en lo que nos hemos convertido puede llamarse un hombre? Levi habla de una zona gris, que es aquella en la que algunas personas del campo se vieron obligadas, para poder sobrevivir, a sojuzgar, maltratar y someter a sus propios amigos. De allí la pregunta, ¿esto es un hombre?”, explica el profesor Luis Jiménez, coordinador del Área de Educación de Espacio Anna Frank.
En noviembre de 2005, la Asamblea General de las Naciones Unidas, reafirmando que el Holocausto será siempre una advertencia para el mundo de los peligros del odio, el fanatismo, el racismo y los prejuicios, designa el 27 de enero como Día Internacional de Conmemoración anual en memoria de las Víctimas del Holocausto. En la Resolución 60/7, la ONU insta también a que se elaboren programas educativos que inculquen a las generaciones futuras las lecciones del Holocausto, con el fin de ayudar a prevenir actos de genocidio en el mundo. Desde 2011, Espacio Anna Frank se unió a esta iniciativa con su programación anual In Memoriam, para fomentar el recuerdo de los graves crímenes perpetrados en el Holocausto y evitar que algo semejante pueda ocurrir nuevamente. A este propósito, el contacto con la historia es importante. En años anteriores, el mensaje estuvo particularmente dedicado a los niños y jóvenes, pero en esta oportunidad va dirigido a un público más adulto, que reflexionará sobre el Holocausto a través de las vivencias del prisionero de un campo de exterminio. La ocasión es igualmente propicia para honrar la memoria de Primo Levi, de cuyo natalicio se cumplirá el centenario en julio de este año.
Espacio Anna Frank promueve la coexistencia, cuya ruta pasa por el respeto a las diferencias, el reconocimiento del otro, la empatía y la valentía moral, que es hacer lo correcto sólo porque es lo correcto”, señaló el profesor Luis Jiménez. “Desarrollar estos valores y actitudes en niños y jóvenes es de suma relevancia, porque así ganamos un espacio para que situaciones como las que narra Primo Levi en su libro no se vuelvan a repetir nunca más”.
Las entradas para el monólogo Si esto es un hombre  podrán retirarse gratuitamente el día del evento en las taquillas del Centro Cultural Chacao, dos horas antes de cada función, las cuales se llevarán a cabo a las 11 a.m. y a las 4 p.m. Se entregarán dos entradas por persona. El estacionamiento del Centro Comercial Lido estará abierto al público en general. Para Espacio Anna Frank es un honor y un privilegio contar con Javier Vidal y Julie Restifo y su equipo en esta historia de reflexión sobre la supervivencia humana.


jueves, enero 17, 2019

José Jesús González en busca de la internacionalización


Venezuela no es el único país para sus habitantes. Miles de ellos se han sido en pos de la internacionalización, un prestigio para ellos y también para su patria. Eso no comenzó ayer, desde el siglo XIX, y mucho más durante la centuria pasada, ha sido la meta existencial de los nacidos en la que fuera la Capitanía General de Venezuela. Se van pero siempre regresan: la mayoría con triunfos o con muchas satisfacciones.
Es el caso de José Jesús González, quien avanza “pasito pasito” con  la difusión de su teatro allende las fronteras, porque  le ha dedicado buena parte de su vida, ya que él no quiere solo destacar en Venezuela y por eso informaque el año pasado fue  muy importante para mis textos, en Colombia el actor Lorenzo Henríquez montó  como actor y director  mi texto Par de viejos,   junto a la actriz y productora Julia Puentes, del  grupo Teatro Alternativo, de Cali, con gran éxito y funciones llenas; este obra es un homenaje a los adultos mayores, esos seres muchas veces olvidados y que dieron tanto en sus días productivos, es un obra con tono de comedia dramática donde una pareja de artistas, cómplices en el arte y en la vida, se reúnen para rememorar glorias pasadas y así evadir su cruda realidad; esperemos una próxima temporada este año, mientras que en Miami, específicamente en el paseo Wynwood, actualmente se presenta, tras mes y medio,  con una gran receptividad y critica  la versión para microteatro  de Las dos Fridas, con la actriz Indira Leal, dirigido por el también actor Miguel Augusto Rodríguez; esta pieza parte del reconocido cuadro de la importante pintora Frida Kahlo donde ella recobra vida en un museo y así confronta las distintas caras de la artista, su obra, sus vida y sus pasiones; es una obra interactiva  que  reúne las dos caras de Frida confrontándolas  bajo el lema “no está mal pensar distinto”. Estoy, pues, muy contento con el recibimiento de estos dos textos fuera del país. No me puedo quejar”.
¿Cuál es la clave
La clave es trabajo y no rendirse, hago eso desde hace veinticinco años y veinte con mi agrupación “Teatro del Encuentro” como dramaturgo, director, docente y muchas veces como productor de mis espectáculos. Ha sido un recorrido muy generoso y arduo, lleno de aprendizaje y de agradecimientos a todas esas personas que de una u otra formas han sido participes de este maravilloso viaje grupal que es el teatro.
¿De dónde le salió ese impulso para escribir?
Desde niño, porque vengo de una familia de docentes; mi abuela Paula García de Linares era maestra y una gran lectora y amante de la cultura; y mi madre y mis tías Mariela, Gaudys y Celina son docentes en literatura. Recuerdo en Mendoza  Valera, estado Trujillo, donde desde chamo estuvimos ligados a la cultura; mi abuela tenía  en su familia Abreu- Burelli- Rivas,    figuras como Miguel Ángel Burelli Rivas y José Antonio Abreu, donde ella compartía en ese pequeño pueblo en distintas actividades literarias, religiosas y culturales. Mi primer contacto con la literatura y el arte fue con el Sistema Nacional de
Orquestas, donde estudie de niño: canto y violín; después, más adelante en Maracay estudié teatro con la dramaturga Mariozzy Carmona, quien me inculcó el amor por las escritura teatral; en esa ciudad me gané la mención honorífica de la Bienal de Literatura  Augusto Padrón, a los 19 años,  y luego aquí en Caracas seguí mis estudios de dramaturgia y estructura dramática  en la UCV, el grupo Theja y la Escuela Juana Sujo con escritores como Isaac Chocrón, Xiomara Moreno, José Gabriel Núñez y Javier Vidal. Es apasionante el hecho de poder seguir aprendiendo; me gusta escudriñar, leer, estudiar. Recién me acabo de encontrar con el maestro Néstor Caballero y le prometí que armaríamos un equipo para realizar con él un taller, como una peña literaria, para refrescar y aprender con ese gran escritor; uno de los últimos brillantes que quedan de su generación. 
¿Qué hará este año? ¿Cuáles son tus metas? ¿Con los espectáculos suyos qué ha pasado o qué pasará?
Seguiremos construyendo país. No es fácil hacer teatro en las condiciones que se encuentra Venezuela, pero soy terco y amo lo que hago, apuesto a un cambio donde todos tengamos nuestros espacios y que podamos vivir como antes con dignidad; sigo escribiendo  un texto llamado El mercado de las culpas sobre la relación del oprimido y el opresor; mi amigo  Dairo Piñeres  me comunico que iré a microteatro de marzo con alguno de mis textos y como director  para esa edición Es una gran vitrina para después confrontar mis textos en versión de una hora. Sigo desde hace años estudiando mi adaptación escénica de ese texto glorioso de Lorca sobre el poder y la represión, La casa de Bernarda Alba, que producirá Manuel Ignacio Madrid y espero este año mostrarla al público.
 “También la actriz Indira Leal tiene pensado seguir con la versión larga de Las dos Fridas y hasta planifica una gira por varias ciudades de Estados Unidos. También me han pedido algunos textos varios productores de México, Panamá y España. Ojala se cristalicen esos sueños. Me gustaría que directores noveles montaran mis textos y me daría mucha ilusión ver una nueva visión escénica de mi dramaturgia. Por ahora este 27 de enero tendremos una función privada de Par de viejos en el Club Santa Paula, con sus grandes intérpretes: José Francisco Silva y Magalys Alvarez, y llevaremos recitales con teatro y música a las Casas Hogares para los adultos mayores, una hermosa labor que descubrimos el año pasado".




miércoles, enero 16, 2019

Se quiere morir Néstor Caballero

Néstor en tiempos mejores.
 Nos vimos en una cola que hacia porque tenía que firmar la necesaria fe de vida para seguir cobrando la pensión que le otorgaron por el Premio Nacional de Teatro, años ha. Pudimos así constatar su débil estado físico y escuchar casi todo de lo que le pasa, mientras se fumaba tres cigarrillos en las escaleras del pórtico de la Casa del Artista. Nos referimos al célebre dramaturgo venezolano Néstor Caballero, nacido en Aragua de Barcelona, Anzoátegui, el 7 de julio de 1951, autor de no menos de una treintena de textos exitosos, la mayoría representados o convertidos en películas.Él y Rodolfo Santana son los grandes escritores teatrales de Venezuela y constituyen un verdadero patrimonio.
“Me quiero morir Morenito”, fue lo primero que nos lanzó y lo repitió a lo larga de esa amarga conversación, que convertí en entrevista para hacerla conocer de los lectores y buscar además conmover a la gente que tenga el poder para ayudarlo a sobrevivir hasta que le llegue la muerte natural. Ese “me quiero morir” repetido como coletilla en sus respuestas, fue tan patético que se nos instaló en los tímpanos y lo más seguro es que nos persiga hasta en sueños.
¿Por qué desea la muerte?
Estoy solo y abandonado y además estoy viviendo en precarias condiciones, especialmente durante los dos últimos años.
¿Morirse es muy fácil: está el suicidio, por ejemplo, y lo puede hacer en el Metro y causar además un escándalo y recibir las maldiciones de miles de personas perjudicadas por ese arrollamiento?
No, eso no, no lo quiero hacer porque sería una pesada culpa para mis hijos y las mujeres que me amaron. Espero que le muerte me sorprenda, de repente.
¿Qué males tiene?
Todos los posibles males en un viejo que no puede, incluso, conseguir las medicinas. Ya se me están cayendo los dientes y eso afectara mi digestión.
¿Cuantos Caballeros hay regados por ahí?
No, mis hijos no son Caballero. Mi nombre legal es Néstor Rafael Martínez Caballero. Yo uso el apellido de mi madre para recordarla, mi padre era un militar. Son cinco vástagos. Fueron engendrados en los matrimonios que tuve con Mireya Tabúas, Beatriz Cifuentes y Dalila Colombo, además de una relación libre con Gennys Pérez, pero  su muchacho no lleva mi apellido por culpa de ella.
 ¿Pero ella dice todo lo contrario?
Que Dios y ella me perdonen, no nos pudimos entender. Muchos hombres no avizoramos el futuro, las rutinas existenciales nos absorben.
¿Pero usted no ha pedido ayuda a los diversos organismos del Estado venezolano?
Si, algunos me han ayudado, pero no fueron satisfactorios. Me metieron a un asilo en el oeste y tuve que salirme porque no me dejaban pasear ni salir a la calle. He optado por vivir, por ahora, en el depósito de un edificio, en Chacao.
¿Pero qué quiere o necesita?
Un espacio cómodo, con los servicios básicos, donde pueda estar. Y eso solo lo tiene un asilo decente, como donde está mi amiga Antonieta Colón. Los ministros que me han atendido en estos años me lo ofrecieron hasta ahora. No tenemos cultura de la vejez en Venezuela, porque todos creemos que seremos jóvenes y bellos hasta la muerte.
¿Y cómo es el sitio donde vive ahora
Es un espacio cerrado, abandonado y con mucha precariedad.
¿Qué pasó con el dinero ganado con su teatro?
Se gastó con mis mujeres y mis hijos y no guarde nada, no seguí el consejo de las ardillitas. Ahora sobrevivo con dos pensiones. La de la Casa del Artista y la del Seguro Social, pero no alcanza, Y lo peor es que estoy solo y a la buena de Dios. Creo que si viviera Chávez esto no me hubiese pasado.
¿Por qué Chávez?
Él me ayudó muchísimo y hasta me hizo director de la Compañía Nacional de Teatro.
¿Cómo fue eso de la Compañía? ¿Hay muchas leyendas de esa etapa?
 Chávez me mandó a que ayudara a Tarek William Saab en la gobernación de Anzoátegui como secretario de cultura y lo hice, pero tuve que abandonar la CNT y al final me quede sin el chivo y sin el mecate. Chávez me habría ayudado un poquito.
¿A usted lo representan muy seguido, dentro y fuera de Venezuela?
Sí, pero tuve que pedir que no le dieran los dineros a Sacven y los destinaran a un hijo mío que está en Estados Unidos para poder recibir los dólares a tiempo, pero todo se gasta.
¿Qué hace ahora?
Aburrirme, dormir cuando puedo, llevo dos años que no puedo escribir nada.
 Y se marchó hasta la estación Colegio de Ingenieros, fumándose su cigarrillo, apoyado en su bastón. Iva barbado, con una franela amarilla y un pantalón marrón, coronado por una gorra de tela de cuadritos, pensando, quizás, en lo que almorzaría y la siesta que tendría mientras le llega lo que necesita o la muerte que le evitaría más penurias. No se puede envejecer solo y sin lo básico para avanzar en ese viaje hacia la eternidad. No hay, por ahora, un manual para envejecer en Venezuela, fue lo último que nos recordó.

Sí,todo un hombre

Jan Vidal Restifo, Julie Restifo y Javier Vidal Pradas

Ambicioso y respetable plan de trabajo tiene Javier Vidal Pradas para este 2019, donde, por supuesto, su esposa, la actriz Julie Restifo, es parte muy importante. Nos cuenta el periodista y destacado teatrero que espera montar la comedia que escribió sobre una familia disfuncional, cuyo nudo es el transgénero, donde el actor Sócrates Serrano encarna a la madre transgenérica.
“Sigo como director artístico en Radio Caracas Televisión Internacional con una atractiva serie sobre mitos y leyendas latinoamericanas escrita por Martin Hahn y José Simón Escalona, cuyo título provisional es Almas en pena. Todo eso nos llevará el primer semestre de este peculiar año. Por supuesto que el 2018 fue absolutamente satisfactorio para mí y mi familia”.
 Admite que su pieza La íntima del Presidente estuvo seis meses en la cartelera del Trasnocho Cultural y dos semanas más  en Miami “con cartel vuelto”, como diría Gabriel Martínez. “Luego me invitaron como director del montaje Doble o nada de la dramaturga y periodista mexicana Sabina Berman, agotando toda su pequeña temporada; este año abrirá en la sala grande del Trasnocho. En el microteatro también participamos con una pieza mía, dirigida por Julie y actuada por mi hijo Jan Vidal Restifo: Qué rica esta la viuda”. 
 Advierte, con satisfacción, que el melodrama La íntima del Presidente, centrada en la vida del general Isaías Medina Angarita y su romántica relación con Estrella Serfati, la madre de Isaac Chocrón, completó su tetralogía sobre el poder en Venezuela y la presencia de los gochos en la política criolla. “Con mis piezas no pretendo historialiciar o historiar nuestro pasado sino poetizar nuestra historia a través de la dramaturgia. Es la mejor forma que encontré para enfrentarme al presente de mi país”.
¿Por qué ese interés por la historia política venezolana y entregar así cuatro textos, todos además representados?
El público joven, ese que va al teatro, por supuesto, poco conoce de nuestra historia mediata y la historia, la petit historia, la historia de cachifas, la historia oral, levanta siempre un atractivo morboso a todo nivel. La cronología que he mostrado como mis cuatro piezas es ajustada, casi exacta a la objetividad de los hechos, pero el diálogo, la vida privada, a todos, nos atrae observarla, degustarla, como voyeristas, como mirones de parque, como mudos infantes tras el ojo de una cerradura. Ahí están, pues, Diógenes Escalante y Ramón J. Velázquez (Las camisas voladoras), Cipriano Castro Y Juan Vicente Gómez (Los compadres), Eleazar López Contreras, Isaías Medina Angarita (La íntima del Presidente), Marcos Pérez Jiménez (La catira del general), todos gochos, todos del Táchira. Son figuras que se revelan teatrales por todos sus costados. Después, dentro de esas ficciones me acompañaron Camilo José Cela, Laureanito Vallenilla, Arturo Uslar Pietri, un gallego albañil de inspiración real, Estrella Serfati y una doncella -la ninfa- para calmar las ansias del sátiro de Castro. Esos fueron mis personajes donde el público y la crítica encontró un lenguaje y una estilística que me adverbializa: vidalianos, vidalianamente, etcétera”
¿Cuál de esos personajes prefiere?
No puedo tener preferencias por ninguno de estos personajes, pero creo que Estrella Serfati, quien le parió dos hijos a Medina Angarita, me iluminó con su luz y su, paradójicamente, oscuridad. Como dramaturgo ni me enamoro ni juzgo a mis personajes. Los expongo como testigo de un tiempo y un espacio para que el público sea el juez. Sólo él, el público, es quien puede juzgar. Desde luego que la crítica, como público especializado, con más razón y mayor conocimiento del hecho escénico. He ahí mi respeto tanto a uno como a otro.
¿Está cerrado, para usted, ese tipo de teatro sobre la historia venezolana?
No, creo que pueden haber aún muchos rincones dramáticos que pueden saltar a la escena. Por ejemplo, López Contreras es una figura clave en los grandes cambios políticos porque fue el mejor traidor de la política al voltearse a los gomecistas. Esperemos a ver cómo avanza la historia contemporánea, en la cual estamos participando todos los que habitamos esta Tierra de Gracia. No podemos adelantarnos a dramatizar los hechos que estamos presenciando, pero si tomamos apuntes para esos teatros posibles.
¿Otros trabajos teatrales en marcha?     
Para el 27 de enero me presentaré en el teatro Municipal de Chacao con el monólogo Sí, esto es un hombre de Primo Levy, judío italiano superviviente del campo de Auschwitz, bajo la dirección de Julie Restifo. Será el primer unipersonal en mi carrera. Sigo celebrándome. Luego iniciaré los ensayos de La señora Imber donde Julie interpretará a Sofía, bajo mi dirección en una versión ajustada al texto del periodista Diego Arroyo Gil. 


jueves, enero 10, 2019

Un musical de la periferia

Todo el equipo humano de Oscuro,de noche y su autor.
Oscuro, de noche, un espectáculo musical popular sobre el asesinato de un muchacho para robarle su nuevecita motocicleta en una calle del municipio Libertador de la Gran Caracas, rescató al dramaturgo Pablo García Gámez para el público que acudió a la sala Alberto de Paz y Mateos al ser producida y programada por la Compañía Nacional de Teatro, durante su temporada 2018. Sobre ese montaje ya escribimos y ahora nos enfocamos un poco más en el autor. 

Desde Nueva York, donde vive, hace un doctorado y trabaja desde hace 26 años, el caraqueño Pablo García Gámez (22 de septiembre de 1961) afirma que está muy satisfecho y más allá de agradecido, “porque el año 2018 me dio la oportunidad de finalmente ver una pieza mía en Caracas, con un montaje a todo trapo -trapo orgánico, de intensidades, no material- como Oscuro, de noche. La tarde que entré al teatro Alberto de Paz y Mateos me resultaba extraño entrar con la consciencia de que iba a ver representado un texto mío en ese espacio donde ha transcurrido parte de la gran historia teatral contemporánea de Venezuela. Por si fuera poco pude ver la dupla Andy Pérez-Dámaso Nieto con mi pieza ¿Y qué es Nueva York? (Cariaquito Morao), trabajo que interpreta Nieto, joven actor, con un profesionalismo impresionante”. 

¿Satisfecho del montaje de Oscuro, de noche, la cual próximamente ahora hará su segunda temporada en Caracas? 

Del montaje de Oscuro, de noche, todo un portentoso trabajo del director Carlos Arroyo, podría hablar muchísimas cosas, pero trataré de ser lo más puntual. Hay una comunicación entre el texto y el montaje; el texto funcionó como base para ese gesto de irreverencia teatral que es el montaje. Es una puesta que lleva la situación a donde quería llegar el texto: un cerro caraqueño, con múltiples formas de habla, con una cultura propia, con su percusión, con su tumbao, con las creencias e ilusiones que pueden haber en un cerro. Esto con sus voces y desde la alteridad, dignificándola. Un amigo hizo el comentario de que Oscuro, de noche es un musical, y hasta cierto punto lo es: es un musical desde la periferia.  

Afirma García Gámez que Carlos Arroyo, además es el director general de la CNT, llegó a construir este circo marginal a través de la música y del trabajo actoral. 

 “Reviento de orgullo tener la experiencia de ver a un extraordinario elenco interpretando… ¡una pieza mía! Chico, esa sensación no se puede describir. Ver a cada intérprete dejando el alma en escena, a cada actor o actriz dando de su identidad al personaje, es una experiencia única. Constantemente digo que admiro a los hacedores de teatro venezolanos. Independientemente de la crisis por la que atraviesa el país, con recursos muy limitados, estos profesionales salen a escena a dar lo mejor de sí. El resultado es que Oscuro, de noche pasó a ser un montaje difícil de igualar en cualquier contexto y que, junto con varias piezas producidas en Venezuela, debería salir a mostrar la creatividad y entrega de nuestros teatrero, nuestros artistas venezolanos. 

¿Por qué fue ahora y no antes tu triunfo en Caracas? 

Son varias las razones. Una de ella es que durante años estuve sin documentos para salir de Estados Unidos, indocumentado pues, lo que me limitaba enormemente. Después, los temas hacia donde apuntan mis textos que tienen como rasgo común ver desde el margen, desde afuera; no buscan estar en las últimas tendencias: al momento de ellos crearse siguen su camino y tal vez su última tendencia sea la de buscar la voz de la comunidad.

Imaginada fuera de la hegemonía. Tienen que caer en manos de aquellos que comparten esa posición. El “ahora” de la pregunta se lo debo a un amigo periodista, Hernán Colmenares, que me sugirió mandara la pieza al concurso de dramaturgia Apacuana, organizado por la Compañía Nacional de Teatro, institución que fundara Isaac Chocrón y el Ejecutivo Nacional en 1984, la cual asumió, como parte del premio, su montaje y la temporada en la sala Alberto de Paz y Mateos. 

¿Qué otro texto tiene por ahí, engavetado o para enviarlo a Caracas? 

Me estoy acostumbrando a que los proyectos salen en la marcha. Siempre digo “este año es esto, esto otro y nada más” y termino con un montón de trabajo. Es, en principio, este 2019 es el año del monólogo. En marzo 8 se presenta en Caracas el Taller de Actuación Espina con Francis Rueda, dirigida por Oscar Acosta; Yrali López Guevara lo estrenará en Puerto Ordaz e Ivonee Varela en Barcelona. En mayo estrena Cheily: Princesa de Catia con Annie Ferrer, dirigida por Maenys José Pérez. Tengo una pieza cuya protagonista es una transformista, Noche tan linda, presentada en Nueva York, Buenos Aires y Lima que me gustaría se presentara en Caracas… de nuevo, el cerro en escena. 

¿Y en Nueva York que pasa con usted y tu teatro?

Si, entiendo tu pregunta, ya tengo varios textos en inglés. De hecho, creo que este 2019 se realizará la lectura dramatizada de uno de ellos, The Old Wound (La vieja herida)- con miras a su producción. Por otra parte, además del par de nominaciones de los premios ACE por -actuación masculina en unipersonal a César Augusto Cova y Dramaturgia a este servidor- Cariaquito Morao tendrá su temporada en marzo. Viene la temporada en el Teatro Círculo, compañía del patio, todos los años organiza la temporada de CallBack donde presentan montajes estrenados en la ciudad, que tuvieron pocas funciones y que merecen ser vistos de nuevo. 

Otro punto que estoy trabajando aquí es promover dramaturgos venezolanos. Estoy involucrado con un grupo, Teátrica, y propuse leer autores venezolanos y que en Venezuela se realicen lecturas de autores hispanos. La primera autora fue Mariozzi Carmona. En octubre del 2018 se realizó una lectura de su pieza Mujermente hablando y mira, la pegamos: ahora en enero Mujermente hablando tendrá su temporada breve, dirigida por Walter Ventosilla, hombre de teatro integral, de origen peruano. Es el intento de convertir en acción mi admiración a nuestros creadores. 

¿Qué hace en este invierno? 

El invierno, además de pasar frío, será para la tesis. Tengo la energía concentrada en finalizar ese proyecto. Sigo de cerca lo que por allá se hace. Escribir implica curiosidad. Cuando puedo, entro a las redes sociales. Me gusta ver imágenes de los diferentes montajes, hay fotos impactantes. También reviso los títulos de la cartelera, comentarios, críticas para tener idea de qué se representa y por qué: por qué determinada obra, qué cosas puede sugerir al espectador, qué impacto puede tener en él. Ello me lleva a tener una idea del país a partir del teatro. 

¿Es el norte una quimera, como lo canta Luis Fragachán, en su guasa popularizada desde 1928? 

Creo que la quimera no es el norte o el sur. La quimera está en la cabeza. En mi caso, el punto fue tener clara mi quimera y aguantar, aguantar muchos no. No fue ni es fácil, pero tanta terquedad con la vida y la quimera se volvió obras dramáticas… que empiezan a conocerse.