El grupo teatral Theja, fundado hace 38 años por José Simón “Chao” Escalona y un grupo de amigos y familiares, no ha muerto ni anda de parranda. Todo lo contrario: vive, ama, lucha y trabaja para continuar en la escena venezolana. No se ha detenido por su éxodo de la sala “Alberto de Paz y Mateos”, donde hicieron montajes históricos y además incrementaron la comunidad artística. Para decirlo en mínimas palabras: El teatro venezolano está en deuda con esa institución por sus aportes estéticos a la puesta en escena.
Pero Theja y su conglomerado de amigos no están esperando reconocimientos ni nada parecido. Prosiguen con sus planes para escenificar al shakesperano Rey Lear (con Javier Vidal protagónico), además de los montajes de Ejecutivas y De todas todas, piezas problemáticas, o difíciles como reconoce su autor, el mismo “Chao”.
Pero mientras llegan esos tres estrenos, además del singular operativo para conseguir las respectivas salas de exhibición, Theja ha publicado Trilogía, un texto de 142 páginas que compila las piezas De todo corazón, De todos modos y De todas todas, escritas por “Chao”.
La presentación de Trilogía, pautada para el jueves 23 de junio en el Ateneo de Caracas a las 7:30 PM, estará a cargo de Javier Vidal y los padrinos serán los actores que intervinieron en las piezas que ya han sido escenificadas, como Julie Restifo, Nacarid Escalona, Virginia Urdaneta, Nacho Huett, Alfonso Medina, Luis Olavarrieta, Héctor Peña y el mismo Vidal.
Hay que recordar que “ Chao” (Ciudad Bolívar, 17 de mayo de 1954) ha escrito y llevado a escena casi todas sus piezas: El último grito de las animas (1977), Cuatro esquinas (1979), Marilyn, la última pasión (1983), Señoras ( 1984), Jav & Jos (1985), Padre e hijo (1987), Ángeles y arcángeles (1988), De todo corazón (1995), A María Queras todos la llaman Mari (1999), De todos modos (2003), De todas, todas (2007) y Ejecutivas (2009).
Vidal, quien hace el prólogo de este libro, con el sopesado ensayo “Trilogía esperanzadora de un Escalona amoroso”, afirma que "Chao" ha sido clasificado en la cátedra de Teatro venezolano contemporáneo del postgrado de Teatro Latinoamericano de la UCV, como un autor de los 80. “Aceptando esta clasificación y corte epistemólogico, me he abocado a reseñar y comentar una pequeña parte de su dramaturgia que por sus características conceptuales se inserta en esta época y mantiene a su vez un contacto con el espíritu del mismo y una independencia poética que la hace original y escapa de cualquier similitud dramaturgistica con su compañeros de generación como son Mariela Romero, Edilio Peña, Larry Herrera Ibsen Martínez, Ugo Ulive y Ethel Dahbar”.
El prologuista califica de trilogía de la esperanza a las piezas que ahora compila la publicación y acentúa que en De todas todas, “el tema del sexo emerge como anatema a la muerte que va declinando en la empinada pared donde Escalona escala sin malla protectora porque aparece nuevamente la homosexualidad como problema social y obviamente el sexo obsesivo en la compleja relación de genero estigmatizado por el entorno hipócrita y de doble moral. Un hombre en las fronteras de los 50, es decir, otro anciano para nuestro país, con un joven en sus 20 con mentalidad y cuerpo de teennager, cuya íntima relación, a pesar de consumarse fisicamente- y parece que bien- nunca termina por definirse en el cotidiano roce del convivir y cohabitar en un mismo apartamento a lo largo de diez años sin dar muchas explicaciones”.
Y Vidal, como piensa y cree muy bien lo que suscribe, destaca que “el dramaturgo no es un consejero con pretensiones didácticas. Es un artista que detecta proyectivamente su entorno y lo expone sobre las tablas en trazos a mano alzada. Cuanto más subjetivo más cercano a la realidad. Cuando más mentiroso mucho más verdadero, mucho más teatral, mucho más artístico. José Simón Escalona, en ultima y primera instancia es un gran artista”.
Habrá que esperar al estreno de Todas todas todas porque es la prueba de fuego de todo texto teatral, aunque nosotros ya devoramos y degustamos imaginativamente esa desgarradora obra, cuyo protagonista, EL SEÑOR, debe cerrar el espectáculo con esta frase que lo resume todo: “la alegría no alimenta a la mentira. De cualquier manera, yo acepto. De todas todas, yo digo si, porque esto es para mi el amor”.
La presentación de Trilogía se hace en el Ateneo de Caracas (Avenida La Salle, Quinta La Colina, diagonal a Venevisión, Colinas de Los Caobos), porque Escalona quiso iniciar así la segunda etapa de su Theja en la nueva sede de la institución que los lanzó, hace 38 años, cuando exhibieron el espectáculo Fulgor y muerte de Joaquín Murrieta, creado a partir del texto homónimo de Pablo Neruda.
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