Ante el variopinto teatro
privado, mal calificado de “comercial”, trabaja y compite el oficial por más público.
Este, a partir del 2013, lo regirá el Centro Nacional de Teatro (CNT), tras ser
metamorfoseada la Compañía Nacional de Teatro. Es un organismo cuya fundamental política brinda apoyos y
recursos a los creadores con calidad artística y apuntala a las nuevas generaciones para lograr una acción
teatral que entretenga y eduque a todos los venezolanos. Se trata de una fundación,
con respaldo del Poder Ejecutivo, presidida por el sociólogo Alfredo Caldera.
El CNT, según
conversación con Caldera, apoya la labor de trabajadores y trabajadoras del
teatro que contribuya al desarrollo de las artes escénicas; facilita a la población
el libre acceso y uso expresivo del teatro como herramienta de consolidación de
su participación comunitaria, para complementar la cultura y la educación
integral; así mismo respalda la creación de actividades escénicas que fortalecen
la participación de la ciudadanía en la producción de bienes culturales, los
cuales permiten el desarrollo de los artistas y brinda al público una acción
cultural, educativa y de entretenimiento.
El CNT continúa con la valoración
del patrimonio teatral para preservar la saga de las artes escénicas; para ello
adelanta un proceso exhaustivo de recopilación y clasificación de documentos hemerográficos, bibliográficos,
fotográficos y videográficos pertenecientes a diversas instituciones privadas, tal
es el caso del Teatro Estable de Villa de Cura.
Durante este
2013, prosigue el proyecto "Teatro
para todos los venezolanos", el cual produce y difunde espectáculos
en el marco de la “teatralidad comunitaria” como herramienta de integración
social, al considerar el hecho artístico desde una perspectiva más accesible,
cercana y materializable, reitera Caldera.
Durante el 2012,recuerda
Caldera, en plena transición de la Compañía Nacional de Teatro, se produjo la pieza de teatro Infantil Cajita de arrayanes y
se coprodujeron 25 montajes con agrupaciones regionales, a saber: Woyzek, Berruecos, Entre sirenas y mariposas,
La esquina del miedo, A propósito del tiempo, Después de la batalla, Páramo,
Mis días en Paita, Maisanta el americano, Íntimamente Zárraga, La colección del
Peregrino, Profundo, El perseguido, Bifronte, Pluto o la riqueza, Josefina La Cantora, Animas,
velorios y calaveras, Romance del papalote que quería llegar a la Luna, Sangre,
Lo que dejó la tempestad, El
último dragón, Muero, luego existo,
Alma, Yo soy San Fernando de
Apure y Las Bacantes.
Caldera revela como se organizó la difusión de todas esas 296 coproducciones en
Caracas y las regiones hasta llegar a 51.216
espectadores, además de dos funciones, en la Sala Ríos Reyna del Teresa Carreño,
de Cajita de Arrayanes. Algunos de
esos espectáculos se podrán apreciar durante el Segundo Festival de Teatro de
Caracas, que organiza Fundarte y el Ministerio de la Cultura, durante los meses
de febrero y marzo del “bisagra” 2013.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario