No hay vademécum para descifrar al teatro de José
Ignacio Cabrujas, preñado de metáforas, porque era un pensador comprometido,
formado con un tanto de marxismo y otro poco de existencialismo, y después
devino en dramaturgo. Algunos críticos
se devanaron los sesos explicando tal frase o una situación escénica de sus
piezas. Y el más sorprendido por tanta sapiencia fue él, quien elaboró sagas
con énfasis en la humanidad de sus personajes y en el contexto donde vivían. Las
pergeñó con estructuras cómodas para que fuesen degustadas por el público basto
o intelectual. Pero su característica vital es que exuda venezolanidad,
condición que lo hace comprensible para los auditorios del mundo.
Cabrujas (1937-1995) respetó al público y por eso la
sencillez y el sano humor que muestra Acto Cultural, la
cual, después de 37 años, volvió a la escena del Teatro Nacional, dirigida por el
primer actor Héctor Manrique, quien actúa al lado de otra valiosa generación
actoral, como son: Melissa Wolf, Samantha Castillo, Angélica Arteaga, Daniel
Rodríguez y Juan Vicente Pérez. Con producción, música, utilería, iluminación,
vestuario y asesoría de Carolina Rincón, Aquiles Báez, Oscar Salomón, José
Jiménez y Eva Evanyi, respectivamente.
Acto cultural, la joyita del FTC 2013, es un excelente y agridulce teatro que montan tres parejas de diversas
edades, moradores de San Rafael de Ejido, para festejar 50 años de su sociedad
dedicada a fomentar las artes, las ciencias y las industrias. Exhiben el dramón
histórico Colón Cristóbal, el genovés
alucinado, pero durante la representación se desdoblan y afloran
contradicciones, frustraciones y las perennes derrotas en que han vivido. El
cuento sobre el descubridor de un mundo es un pretexto para intentar trascender
como artistas antes esa comunidad que los contempla, pero la realidad es que
están íngrimos.
“El buen teatro
se explica solo y desde la escena” o “Nadie debe temer a lo obvio o lo simple”,
podrían haber sido algunos de sus lemas, pero Cabrujas escribió teatro como
quiso y ahora espera a la audiencia de esta centuria para que disfrute y saque
sus propias conclusiones.
Acto cultural , como lo explica Leonardo
Azparren Giménez, es la mejor metáfora de esa Gran Venezuela que el país creyó ser a
partir de 1974 por la bonanza petrolera, donde la gente de San Rafael de Ejido
tiene o quiere tener una visión grandiosa de si, haciendo caso omiso de lo que
son en realidad…“Queda claro el plan de Cabrujas: revisar y desmitificar la
historia oficial de un héroe, ser fiel con los fracasados que tanto le
interesan, hablar de lo que le pasa y deslastrarse de mucho más”.
¡Anoche, los caraqueños aplaudieron hasta rabiar porque
se vieron en escena! ¿Cabrujas alude a la soledad del artista en una sociedad
que lo ignora? ¿Cuestiona al país que vive únicamente para efemérides y no
afronta los problemas que lastran su desarrollo?
¿Y qué podemos decir del espectáculo como tal? ¡Grandioso!
Como tenía que ser con una institución, el Grupo Actoral 80, festejando sus
primeros 30 años de vida útil y demostrando porque sí tienen futuro. Todos los
comediantes jóvenes revelaron que aprendieron la lección y que con ellos no se perderá
el buen teatro venezolano, especialmente la múltiple Melissa, y que el veterano
Manrique, a quien yo hace años bautice como “el zar del teatro”, que cada vez es
mejor, como el buen vino.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario