jueves, junio 29, 2017

¡Santana vive!

La resurreccion de los muertos es por ahora en el teatro 
Nos comprometimos bajar a Guarenas para conocer su apartamento y festejar además sus primeros 68 (número que consideraba cabalístico) con unos cuantos rones y un orgiástico arroz a la marinera, según la receta familiar de Aura Salas, que cocinaría para ese natalicio del 25 de octubre de 2012. Fue imposible aquella fiesta porque hizo mutis cuatro días antes. Sí nos reencontramos. Nos despedimos desde el escenario del teatro Nacional de Caracas, en medio de un tsunami de flores y reposando en lujosa urna que sus fieles amigos Juan Carlos Losada y Freddy Ñáñez le consiguieron.
La muerte física de Rodolfo Santana Salas privó al teatro venezolano de uno de sus más importante autores de las últimas décadas, gracias a sus originales personajes, argumentos y situaciones que lo convirtieron en dramaturgo universal, de no menos de 100 obras, la mayoría de ellas reescritas porque las sometía al proceso del obricidio, que era la reescritura parcial o definitiva para comprobar que funcionaran bien ante los siempre exigentes y cambiantes espectadores.  ¡Él se daba así una y otra oportunidad de mejorar sus productos!
AVENTURA DEL TEATRO
En sus obras plasmó siempre el cuadro aterrador de lo que han significado las matanzas, las guerras sin sentido, los presos de conciencia, los desaparecidos, las falsedades de los yuppies, lo hecho por el FMI. También en sus parlamentos se dan cita los oligopolios, los banqueros y los políticos al servicio de estos. Todos junto a los que se oponen a los cambios políticos y conforman un cuadro de decadencia, el más oscuro rostro de estos días. ¡Pero eso tendrá que desaparecer más temprano que tarde!
Ahí, pues, está su legado literario a la espera de productores y directores ambiciosos, una vasta obra centrada en el drama de la sociedad venezolana que camina poco a poco hacia el materialismo, producto de los drásticos cambios políticos que se dieron en el mundo en los últimos tiempos. Dejó un teatro centrado en meditaciones sobre la muerte pero no sobre el fin del ser humano ni sobre la eutanasia, sino una exhaustiva y profunda meditación sobre otras formas de vivir, donde reiteraba el fin de un sistema político erigido en el autoritarismo y además el agotamiento de un modo de encarar la vida colectiva, señalando el cuadro horripilante de todo lo hecho contra el mundo, contra la estabilidad, contra las personas, sociedades y naciones. No era conformista sino todo lo contrario. Un rebelde con muchas causas.
Es por todo eso que Rodolfo Santana Salas es el autor más vital e importante de las ultimas décadas del siglo XX, en la medida que sus argumentos, personajes y situaciones siendo auténticamente venezolanos se hicieron universales, como se pudo representar y comprobar al ser mostrados y aplaudidos en los escenarios foráneos,.
También Santana Salas peleó por la publicación de sus obras, porque de esa forma lograba salvarlas de las mortales gavetas de la espera, hacerlas llegar hasta los productores y directores interesados, dentro y fuera de Venezuela, y alcanzar así al público para quienes escribió y por disfrutó de aceptables derechos de autor.
 En un breve ensayo biográfico que le hicimos hacia 1995- Rodolfo como es Santana- dijo que escribía teatro porque no pudo ser Hilary escalando el Jomolunga o el monte Everest, mucho menos Marco Polo o Charles Limberg. Vinculó la escritura a la aventura y creía que los seres humanos debíamos asumir la vida como un viaje, con naufragios irremediables. Reiteraba que la historia estaba repleta de héroes viajeros, con descubrimientos y combates.
EMPRESA LOCA
Perdimos la cuenta de sus obras que vimos representadas, dentro y fuera de Venezuela, pero es La empresa perdona un momento de locura (1974) -llevada al cine por Mauricio Walerstein en 1978- la que más nos impactó y la que lo hizo internacional y afamado. Nos contó que todo fue consecuencia de un largo  proceso de aprendizaje que lo llevó primero a  dictar un taller de expresión  y lectura en  una comunidad terapéutica durante cuatro años, donde se aplicaron las más novedosas técnicas del campo psiquiátrico, donde hubo un episodio real: un obrero que se accidentó y arremetió contra las máquinas de la empresa donde trabajaba; luego el mismo obrero ingresó a tratarse en dicha comunidad y esto le proporcionó una idea global de la cual nació La empresa perdona un momento de locura.
Para gestar esa obra realizó dos procesos simultáneos y convergentes: uno documental y otro testimonial. En el primero se sumergió en el estudio de la psicología industrial como ciencia que intenta ejercer una función de dominación sobre el obrero en concreto. Luego investigó el caso real, verdaderamente ocurrido, así como otros similares de otros obreros y sus experiencias con la aplicación de la psicología industrial. Fue de lo general a lo individual, de la psicología industrial aplicada -no solo en Venezuela sino aún en sociedades altamente desarrolladas como el Japón- al caso humano vivo, para volver a lo general.
Puntualizó que sobre el psicoanálisis y la psiquiatría que aparecen en La empresa perdona un momento de locura se debe subrayar que son   ciencias utilizadas como instrumentos de dominación, y que la ciencia aplicada, como la publicidad por ejemplo, están en función de un proceso de dominación y de transculturización, pero no es necesariamente  y que  en nuestra manos la ciencia puede y debe ser un instrumento de liberación en un nuevo orden del mundo, porque luego del descubrimiento de América el mayor descubrimiento de las ciencias humanas fue el inconsciente.
RESURRECION DE LOS MUERTOS
 Santana Salas, que vivió al día en cuanto a temáticas culturales y tecnologías de la comunicación, escribió hacia el año 1984 la comedia Rock para una vuela virgen, que estrenó en Caracas durante la temporada de 1987 y fue llevada además al cine por Olegario Barrera en 1998. Llegó a los venezolanos con un planteamiento tomado de la vida cotidiana: que pasaría si pudiéramos echar para atrás el reloj o el almanaque de los años vividos y revivir así, de otra manera una etapa de nuestra existencia. Se inventó pues el cuento de una abuela octogenaria que muere y Dios le permite, después de muchos años, regresar a la tierra venezolana para interactuar con una sobrina muy contemporánea y vivir lo que no pudo antes.
La pieza, que ahora se mostró en la Sala Rajatabla, originalmente se desarrolla a partir de una noche en que un trompetista, entre los estragos de una feroz borrachera, intenta desahogar sus penas tocando su instrumento y logra, por accidente, emitir la nota exacta reservada solo a los querubines, quienes con las trompetas celestiales deberán resucitar a los muertos el Día del Juicio Final. Y por eso se logra resucitar a la abuela Antonieta y esta reaparece en el apartamento de su nieta Mónica, quien se está mudando, y en su no programado reencuentro logran desatar junto al personaje de Francisco, el marinovio de Mónica, una disparatada historia de amor, con la participación de un ángel que va y viene porque quiere corregir el error cometido por ese músico.
Una historia fantástica pero repleta de  sano humor que obliga a que el espectador contemporáneo se replantee y como  no puede  desandar lo andado pues tratara de ahora de ahora  en adelante mejorar lo presente. Es una comedia para matar sanamente el tiempo, un espectáculo bien resuelto en la dirección por Jennifer Morales y actoralmente convincente por Adriana Bustamante, Emilshen Acevedo, Elmer Pinto y Luis Ernesto Domínguez. Es un elenco que tiene condiciones para resolver los roles que les propongan.
Una vez más las aventuras del teatro venezolano continúan, mucho más cuando se trata de los textos de Rodolfo Santana, un autor muy comprometido, quien exigía luchar para materializar los anhelos de su pueblo. ¡Un guerrero que sigue vivo mientras se le muestre en la escena!

lunes, junio 26, 2017

Regresa el general Pérez Jiménez

Jan Vidal,Julie Restifo y Javier Vidal en otra empresa cultural.
 La catira del general sería la tercera de mi primera trilogía sobre el poder político a la venezolana, la cual circunstancialmente está enmarcada en la región andina del Táchira, donde su gentilicio, entre cariñoso y despectivo, es gocho”, así dispara, literariamente, el periodista y actor, además de dramaturgo, Javier Vidal Pradas, al referirse a su nuevo estreno teatral, pautado para el viernes 30 de junio, a las 7 pm, en el teatro Trasnocho Cultural.
 Gochos fueron, acentúa Vidal Pradas, los venezolanos Cipriano Castro, Juan Vicente Gómez, Eleazar López Contreras, Isaías Medina Angarita, Diógenes Escalante, Ramón J. Velázquez y Marcos Pérez Jiménez. “Me quedaría pendiente Carlos Andrés Pérez, pero por ahora no me interesa llegar a una tetralogía; todos son protagonistas de esta saga andina en mis tres piezas”, comenta.
 Explica que en su casa, aquí en Caracas, desde niño escuchó mucho más el nombre de Cela que el del dictador. “Dentro de mi hogar, con papà y mamà catalanes, el dictador tenía un solo nombre: Francisco Franco. No había otro. Mi tío Sol Pradas Gil era jefe de lavandería del hotel Tamanaco y llegó a conocer a Camilo José Cela y los cuentos de sus cuentos eran relatados cada tanto junto al nombre de La Catira, toda una afrenta al nacionalismo como en su tiempo lo fue Salvador de Madariaga con su Bolívar. Al tener conciencia literaria en mi adolescencia y a través de mi maestro claretiano el sacerdote Eduardo Blanco descubrí La Colmena, fascinante novela plural con sus decenas de personajes; La muerte de Pascual Duarte, tan violenta como fascinante -ambas rabiosamente carpetovetónicas- y un photobooks intitulado Izas, rabizas y colipoterras que encontré en la biblioteca de Gloria Goldmitz en mi inocente juventud preuniversitaria, que me arrugaba, según puedo recordar, el corazón mientras no dejaba de reír burlonamente de esas pobres mujeres de la calle. La Catira es una novela que llegó a mis manos tardíamente, influenciado, quizá, por la leyenda negra que mi familia me había construido en mi imaginario infantil. Cela es un gran escritor, no voy a decir lo contrario”.
 Reitera que Cela era un magnífico novelista. “Entrevistado era petardista, homófobo y españolista. Alejado de la izquierda caviar y muy incómodo para la derecha católicanacionalista. Su Nobel me llevó a leer definitivamente La Catira y más que molestarme me resultó, a la distancia, un libro de humor con un sarcasmo proyectivo sólo entendible a estas alturas de este nuevo renacer de ramplonería chauvinista y castro-comunista. Sí, chauvinista, no hay fe de erratas. Cuando inicié mi travesía iniciada con Diógenes Escalante ya tenía en claro que Pérez Jiménez sería el cierre de esta nueva trilogía. Cela me ayudó a incluir a la intelectualidad y el arte frente al “Ogro filantrópico” como menta Octavio Paz. Las dictaduras siempre se han valido de las muletas de los intelectuales para justificar su gendarmería. La intelligentsia al servicio de lo más abyecto e infecto de nuestra sociedad: el poder corrupto autocrático. En nuestra actualidad algunas muestras de esa connivencia son bien conocidas”.
 Advierte que con Pérez Jiménez vivimos ese tipo de contradicciones tanto con artistas como Carlos Raúl Villanueva, de comunistas convictos y confesos del realismo socialista a saber César Rengifo, como de igual manera y sin remordimientos estéticos Pedro Centeno Vallenilla, primo de Laureano Vallenilla-Lanz Planchart.
PURA FICCION TEATRAL
 Reitera que su pieza La catira del general es la ficcionalidad del encuentro de un “encargo” entre un novelista, un dictador, su culto y civil ministro del “interior” y un migrante gallego albañil. Ahí están, a partir de entrevistas, la investigación, la documentación hemerográfica, unas cuantas obras literarias, memorias, biografías y el gran aporte editorial del premiado ensayo de Gustavo Guerrero, Historia de un encargo. “Mi pieza teatraliza los momentos del encuentro entre el gendarme necesario de Marcos Pérez Jiménez y el escritor Camilo José Cela a instancias del ministro Laureano Vallenilla-Lanz Planchart para encargarle la escritura de una novela que se insertara en el Nuevo Ideal Nacional y enterrara la Doña Bárbara del novelista y defenestrado presidente, el escritor Rómulo Gallegos. Con ésta obra cierro mi trilogía sobre el poder y los gochos, iniciada con Diógenes y las camisas voladoras y Compadres.
FICHA TECNICA
Dice Vidal que sobre las tablas del teatro estarán, pues: Sócrates Serrano como Camilo José Cela; Juan Carlos Ogando como el presidente Marcos Pérez Jiménez; Jan Vidal-Restifo como Francisco Ogando y el primer actor Gonzalo Velutini como el ministro Laureano Vallenilla-Lanz Planchart. El Video-Arte del montaje es de Daniel Dannery; la dirección de arte está   resuelta por Vladimir Sánchez, la coreografía de Beatriz Álvarez; la composición en gaitas es de Gabriel Figueira de Gaélica; la asistencia de dirección de Catherine Medina, asistencia de escena de Sergio Malpica. Todos bajo la producción de Jota Creativa, Julie Restifo, Samuel Hurtado y mi dirección general”.


sábado, junio 24, 2017

Kafka se hospeda en el teatro Nacional

Director y productor general de la CNT.
Hotel Kafka es el nuevo espectáculo de la Compañía Nacional de Teatro (CNT) que será exhibido desde el 22 de julio en el teatro Nacional de Caracas, bajo la dirección de Marisol Martínez, con la producción general de Alfredo Caldera, actuado por Angel Pelay, Sandra Moncada, Randimar Guevara, Dayana Cadenas y Wahari Meléndez, contando además con el dispositivo escenográfico creado por Carolina Raga.
Esta directora Marisol Martínez, bastante conocida por sus montajes de circo y algunas experimentaciones escénicas, se ha destacado gracias a sus audaces propuestas sensoriales que buscan integrar al público con sus espectaculos hasta integrarlo o vincularlo con la obra en situaciones extremas y llevarlo incluso a un territorio poético efervescente, como han comentado algunos analistas. Es, pues, una artista con perfil propio, algo que es necesario siempre, pero hay muy pocas como ella.
 Este espectáculo, que estará no menos de cuatro semanas, durante una primera temporada en el teatro de la esquina de Cipreses, como lo subraya su directora Martínez, es una adaptación libre de cinco relatos de Franz Kafka, los cuales han sido transformados en textos teatrales por la misma puestita, quien además es licenciada en Letras y egresada de la UCV. Ella tomó relatos como Un informe para la academia, Un artista del hambre, Un artista del trapecio, Metamorfosis y La ley para elaborar así el básico libreto de trabajo. “Es la consecuencia de una investigación que se hizo a partir de la biografía y la obra en general de Kafka, hasta que pudimos generar un creativo texto para el montaje, de carácter experimental y basado íntegramente la literatura kafkiana”, ha dicho, tras comentar que siempre ha disfrutado con la producción del afamado escritor, quien murió a los 41 años, tras haber nacido en Praga hacia 1883.
  Hotel Kafka es, pues, una adaptación totalmente libérrima, basada en los argumentos de cada uno de esos textos, con sus personajes y sus contenidos. “Lo que hicimos fue ponerlos dentro de un espacio teatral y por eso lo hemos titulado Hotel Kafka, por una natural analogía. Se trata de un espectáculo itinerante y adecuado para hacerlo o mostrarlo en espacios alternativos. Nuestra propuesta para el estreno se inicia en el foyer del primer piso del teatro Nacional y se mueve por todos sus espacios, adecuadamente intervenidos por la escenógrafa Carolina Raga. El público llega a un hotel, donde su dueña invita a los espectadores-huéspedes para que visiten los espacios de dicho local. Pretendemos generar un espacio teatral propicio para la representación de esos cinco textos, con sus cinco espacios y sus cinco atmosferas. El público deambulara por ese hotel y podrá ver así la Metamorfosis”, apunta Marisol, quien aclara que “llego a Kafka porque lo estudie muchísimo, desde cuando incursionaba en la UCV. Me gustan mucho los mal llamados poetas malditos”.
Está considerada como una de las pocas directoras teatrales que trabaja a partir de ideas propias, capaz de generar sus propios textos o reescribir lo que le caiga en las manos. “No tengo miedo a correr riesgos porque vengo del circo y prefiero arriesgar que trabajar en la comodidad de los convencionales. He estrenado montajes como El tour, El banquero anarquista, Reverón y Un fausto anda por la avenida, todos obtenidos a partir de la deconstrucción de los textos teatrales o literarios, a los cuales he considerado como unas herramientas. Por eso mi teatro está basado en la puesta en escena”.
¿Qué  ha pasado con el circo?
 El circo es una herramienta o un lenguaje donde hay un especial trabajo físico con los actores y donde se les exige mucho más a sus intérpretes. Con Hotel Kafka haremos varias temporadas y para fin de año presento un montaje con la Fundación Rajatabla, posiblemente con una pieza de Bertold Brecht.
Nieta talentosa
 No es el primero ni el ultimo trabajo teatral que se aborda desde los textos y la biografia de Kafka, pero creemos que marcarà epoca para la historia de las artes escènicas venezolanas porque la directora Marisol Martìnez  (nieta de Lily Àvarez Sierra y Gabriel Martìnez, valiosa pareja de pioneros del teatro) pretende crear un  espectàculo que estè  a la atura del sufrido existencialismo del escritor, quien viviò una època convulsa y de futuro incierto, muy similar a la que vivimos ahora en el mundo contemporàneo. Ella subrayarà, con su trabajo y el de los actores, los verdaderos significados del adjetivo kafkiano que se refiere a las sociedades asfixiantes donde los seres humanos deben superar situaciones extremas y absurdas pero que sì que pueden ser superadas


miércoles, junio 21, 2017

La razón blindada

El actor Adames en escena
“Los poetas tenemos que seguir envenenando las cosas reales del mundo para que no las olviden los hombres del poder, quienes andan siempre entre sus cifras, sus monedas, sus novedades o sus máquinas”. Así lo dijo esa rara avis que fue Juan Liscano Velutini, precisamente cuando recibió el Premio Nacional de Literatura, aquel el 24 de julio de 1951, momento que le sirvió además para recordar que el más alto de los poetas del mundo gritó que “debemos amarnos los unos a los otros…pero en la justicia”.
Y evocamos ahora al vate Liscano Velutini porque precisamente aquel poético  y maravilloso mensaje de amor y justicia, titulado Humano destino, lo utilizamos para conceptualizar al extraño y además sorprendente espectáculo La razón blindada, basado en la pieza homónima de Arístides Vargas, el cual hace temporada en el Teatro San Martin de Caracas, gracias al director, productor y actor Luis Bernal y el primer actor Salomón Adames, con la asistencia de Demis Gutiérrez y el soporte escenográfico de Armando Zullo.
TEATRERO TACHIRENSE
 Este Luis Bernal, nacido en el tachirense San Cristóbal y quien desde aquel año 1972 está sin reposar por los avatares de su existencia y porque ha buscado ser útil a la patria y su familia por intermedio del esmerado cultivo de las artes escénicas. En el Taller Nacional de Teatro (TNT)-fundado por Carlos Gimenez en el mejor momento de su huracanada existencia aquí en Caracas- se hizo teatrero hace más de 20 años y ahora, al frente de su agrupación productora “Con los pies en las tablas”, exhibe ese poético texto del teatrero argentino Arístides Vargas sobre sendos quijotescos personajes.
Graduado también en la Universidad Nacional Experimental de las Artes (Unearte), y tras montar Pony, nunca te he negado una lágrima de Gustavo Ott, se dio a la tarea de escenificar Nuestra Señora de las Nubes, también de   Arístides Vargas, con la que recibió gratas críticas al presentarla en un Festival Creajoven, en el Celarg.
Bernal escenificó Nuestra señora de las Nubes tras disfrutarla durante un Festival Internacional de Teatro, representada por el grupo Malayerba, de Ecuador, con el autor Vargas interpretándola junto a su esposa Charito. Quedo impactado. Luego asumió el reto de dirigirla y actuarla. Nuestra Señora de las Nubes es una obra que está más vigente que nunca y si hay algo que me llama la atención de su dramaturgia es la manera poética de reflejar la realidad de nuestros atormentados países. La pieza es un canto universal, un grito de libertad…una mezcla de tristeza y estímulo a la imaginación. Es un lugar donde se construyen y crecen las utopías. Una metáfora de lo que significa el exilio, que aparece dibujado en múltiples formas. Mostrando aquello que se ha vivido y padecido en silencio. “Por lo tanto considero que es una obra importante que mostrar, tanto como necesario es un teatro donde hay tantas cosas que decir, y donde tenemos la capacidad de ser oídos y la osadía de romper con todos los silencios. Una obra que es un gran rompecabezas donde intentamos reflejar el desarraigo violento del propio país”, dijo Bernal.
TECNICAS
Explica Bernal que cuando lee una obra y se siente enganchado con la temática, el argumento, los personajes y sobre todo el mensaje, o, como se dice en el lenguaje teatral, el subtexto, “pues uno inmediatamente dice: esto tengo que mostrarlo a través de un discurso escénico y con actores y actrices que le den vida a cada personaje y trasmitan el mensaje no sólo que está implícito en la obra sino lo que yo como director quiero comunicar. Porque los que ejercemos este oficio, al mismo tiempo utilizamos el medio para expresarnos y decir lo que sentimos y pensamos no sólo del país, sino del mundo y la gente que lo habitamos. Me interesan las obras que sacudan al público. Que lo hagan no sólo reflexionar sino también lo lleve a hacerse preguntas. Las piezas que he montado tienen que ver con la realidad de nuestros países, tanto en lo político, como en lo social y cultural. Y eso me gusta reflejarlo en el escenario para que el público de alguna u otra manera sienta y vea lo que estamos haciendo nosotros como sociedad”.
LA RAZON BLINDADA
La razón blindada ha sido calificada como un poema para exaltar el poder liberador de la imaginación y como forma de resistencia a la represión. Basada en la vida real del hermano de Vargas, otra víctima de la dictadura argentina, toma ideas y conceptos de El Quijote de Miguel de Cervantes y La verdadera historia de Sancho Panza de Franz Kafka. Se elabora así una especie de libreto o guión sobre la supervivencia de dos presos políticos, de esos que a mala hora pululan en este balcanizado continente: De la Mancha y Panza, quienes se encuentran a las tres de la tarde de cada domingo, el único día   que se pueden ver en el patio de la cárcel, para tratar de representar una historia que les permita “liberarse” a través de la imaginación del encierro al cual fueron sometidos. Ambos sobreviven en el inframundo que representa la prisión a la cual fueron condenados injustamente. Ellos se entregan a un ritual con sus personajes entregados al frenesí de la locura real o imaginaria donde la ficción y la realidad deben cohabitar para que la vida sea posible. Ya que la creación de un mundo paralelo al infierno diario hace posible la salvación, ha dicho el mismo Bernal, quien encarna a Sancho Panza.
Ya Arthur Miller dijo que el teatro es el único lugar que tiene el hombre para vivir y soñar en libertad, aunque en este caso es más patético y hasta lacerante. Los dos privados de libertad se salvan porque sueñan, hacen teatro y esperan que llegue la justicia. No puede haber amor sino hay justicia, dijo Liscano años ha.
En La razón blindada se sufre con unos seres humanos sometidos a un castigo brutal e injusto, donde se desprende el terror que nos imponemos con las desgracias a las que nos sometemos y la grandeza que nos pueden dejar los momentos más degradantes de nuestra existencia.
Cabe destacar que los antihéroes de Arístides Vargas sobrellevan humillaciones y derrotas, se empecinan en retener el espíritu lúdico, el afán de aventuras. Van de la llanura manchega a la Patagonia, cruzan montes y ríos para arribar al páramo andino… pasan el “túnel intangible” y con la frágil pero imbatible fuerza de aquellos presos políticos, exiliados, rebeldes- que conservan la ternura, la risa, y la pasión por jugar y crear- historias para alcanzar la libertad profunda; esa utopía que todos parecemos perseguir alguna vez.
De La Mancha,​personaje magistralmente creado por el primer actor Salomón Adames, es el caballero sediento de aventuras y desbordante pasión por su Dulcinea, loco-lúcido, manchego, patagónico o tropical, que por encima de su origen geográfico, es el paradigma del idealista. Un Quijote que confunde cárceles con paraísos y desiertos, y que se exilia en la sinrazón, en ese extraño desorden que no hace mal a nadie pero que ayuda profundamente a vivir.
Panza,​encarnado sobriamente por el actor y director Luis Bernal, quien representa a la perfección la dualidad entre el personaje literario y el creador de historias coexistentes en él. Unos personajes muy expresivos y convincentes capaces de hacer reír, llorar, sufrir por ellos y con ellos hasta el final de la obra.
Esta puesta en escena de Bernal se caracteriza por su sobria autenticidad en la dirección, las actuaciones y la escenografía –un par de sillas que se convierten en rejas y en otros marcos básicos para apuntalar las acciones actorales- es una especie de tercer personaje, metálico en su esencia pero hermosamente útil y hasta frágil. Un gran aporte de Zullo.
Con un tono, lúdico, algunas veces trágico y otras veces humorístico, La razón blindada mantiene cautivada la atención del espectador de principio a fin, en sus intensos 80 minutos.


Gran festival de cine gay en Venezuela

Del 30 de junio al 7 de julio se estará realizando la decimoprimera  edición del  Ciclo de Cine de la Diversidad,  enmarcado en el mes del orgullo LGBTI (Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transgeneros, Transexuales, Travestis e Intersexuales) en varias ciudades de Venezuela.
Este Ciclo de cine gay o LGBTI, creado por el cineasta John Petrizzelli, hace 11 años se lleva a cabo gracias a su empresa Infinito Films, conjuntamente con Alianza Lambda de Venezuela, bajo la responsabilidad del activista Ricardo Hung,  y el Circuito Gran Cine que se suma en esta edición como co-organizador del evento. Este evento forma parte del Sistema Nacional de Festivales y Muestras de Cine de Venezuela y cuenta con el apoyo del Centro Nacional Autónomo de Cinematografía (CNAC), Amazonia Films, la Fundación Cinemateca Nacional, las embajadas de España y Francia, además de numerosos aliados institucionales y organizaciones no gubernamentales sensibilizados con la lucha de las minorías sexuales.
El Ciclo tendrá como sede principal en Caracas las salas Paseo del Trasnocho Cultural de Las Mercedes, el CineCelarg3 del Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos y el Instituto Cultural Brasil Venezuela en Altamira, así como la Sala Cabrujas de la Fundación Cultural Chacao, la Facultad de Humanidades de la UCV y la sede de Inamujer en la Avenida Urdaneta.  En Maracaibo el ciclo se mostrará en el Centro de Artes Lía Bermúdez y en la ciudad de La Victoria, estado Aragua, en el Cine City.
En una presentación especial se proyectará la película Bárbara, de John Petrizzelli, en la remota comunidad de Espino, estado Guárico, cuyos paisajes sirvieron de escenario natural para la película.  En televisión abierta, así como también TDA y operadoras como Supercable y Directv, la señal de ViveTV mostrará una selección  de películas de nuestras ediciones anteriores; igualmente se proyectará otra selección en toda la Red de Salas a nivel nacional de la Fundación Cinemateca Nacional.
Como parte de la celebración de los 120 años del Cine Nacional se contarà  con funciones especiales en preestreno de dos películas de temática LGBTI: la ya citada Bárbara y la coproducción con Puerto Rico Extra Terrestres de la directora Carla Cavina, quien estará presente  como parte del lanzamiento posterior del film en las salas de cine del país.
También para esta edición será el estreno en Latinoamérica de un programa de cortometrajes del cineasta británico transgénero Jake Graf que toca los temas de identidad de género y cuya obra ha causado polémica en Europa por sus planteamientos. Aparte de los filmes mencionados se cuenta con una amplia muestra de más de 15 largometrajes de ficción, documentales y 17 cortometrajes  provenientes de países tan diversos como Alemania, Argentina, Brasil, España, Estados Unidos y Francia.  
Entre otros estrenos internacionales para esta 11va. edición se encuentran  los largometrajes estadounidenses Ann y LGBT: La experiencia, dirigidos por los venezolanos Carla Forte y Tom Monasterios, respectivamente, y de Argentina tendremos Como una novia sin sexo, de Lucas Santa Ana y La vida después,  de Franco Verdoia y Pablo Bardauil.

El general necesitaba su catira

El público dirá  la última palabra sobre  este nuevo espectáculo teatral ambientado en la Venezuela del dictador general Marcos Evangelista Pérez Jiménez, quien tuvo su fascista delirio para manipular a las masas a través de la cultura .Todo eso, que es auténtico o histórico se verá en La Catira del General, pieza original de Javier Vidal que desde el viernes 30 de junio estará presente en la cartelera del teatro Trasnocho Cultural.
Escrita y dirigida por el periodista, actor, director y dramaturgo Javier Vidal Pradas el año pasado, La Catira del General es la historia fabulada de Camilo José Cela, escritor español ganador del Premio Nobel y representante intelectual  de Francisco Franco Bahamonde, en la Venezuela de Marcos Pérez Jiménez y su Nuevo Ideal Nacional. Cela será el responsable de crear, bajo las directrices del Ministro del Interior Laureano Vallenilla-Lanz Planchart, un personaje de ficción lo suficientemente efectivo para destronar del imaginario popular de la Doña Bárbara de Rómulo Gallegos, en un esfuerzo por disfrazar la ideología del Nuevo Ideal Nacional con nombre y guiños de una sensual mujer.
De esta forma, Vidal cierra suTrilogía del Poder iniciada con Diógenes y las Camisas Voladoras (2011) cuya idea germinadora es la presencia de los civiles al servicio de la democracia, Compadres (2013) que versa sobre los militares y el militarismo, y La Catira del General (2016), que pretende ser un fuerte cuestionamiento a los artistas e intelectuales al servicio del poder,ya que el autor tiene su vision sobre ese fenomeno.
Es así como Sócrates Serrano encarna a Camilo José Cela, Gonzalo Velutini a  Laureano Vallenilla-Lanz Planchart, Juan Carlos Ogando a Marcos Pérez Jiménez y  Jan Vidal Restifo a Francisco “Paco” Ogando: personajes que alguna vez fueron protagonistas de nuestro acontecer político-cultural en una novedosa puesta en escena que ofrece un número de danza tradicional coreografiado por Beatriz Álvarez del grupo Lembranzas de la Hermandad Gallega en Venezuela y música venezolana interpretada en gaita por Gabriel Figueira, integrante del grupo Gaélica.
La Catira del General es patrocinada por la Embajada de España en Venezuela  y dirigida por Javier Vidal asistido por Catherine Medina, en una producción ejecutiva de Jota Creativa Producciones con Julie Restifo en la producción general, Gonzalo Velutini como productor ejecutivo y Samuel Hurtado como productor adjunto. Además, cuenta en su diseño gráfico con ilustraciones exclusivas de Eduardo “EDO” Sanabria, la dirección artística de Vladimir Sánchez, iluminación de Dorwis Yuncosa y exquisito videoarte de Daniel Dannery.
La Catira del General estrena temporada el próximo 30 de junio a las 6:00pm, con funciones los viernes a las 6:00pm y sábados y domingos a las 5:00pm. Las entradas tienen un costo de Bs. 4.500 (+IVA) y pueden adquirirse en las taquillas del Trasnocho Cultural, ubicadas en el sótano del centro comercial Paseo Las Mercedes, o a través de los portales 


lunes, junio 19, 2017

Hotel Kafka en la esquina de Cipreses

Alfredo Caldera y sus anuncios sobre las obras de la CNT
 Hotel Kafka es el nuevo espectáculo de la Compañía Nacional de Teatro (CNT) que será exhibido desde el 22 de julio en el teatro Nacional de Caracas, bajo la dirección de Marisol Martínez, con la producción general de Alfredo Caldera, actuado por Angel Pelay, Sandra Moncada, Randimar Guevara, Dayana Cadenas y Wahari Meléndez, contando además con el dispositivo escenográfico creado por Carolina Raga.

Esta directora Marisol Martínez, bastante conocida por sus montajes de circo y algunas experimentaciones escénicas, se ha destacado gracias a sus audaces propuestas sensoriales que buscan integrar al público con sus espectaculos hasta integrarlo o vincularlo con la obra en situaciones extremas y llevarlo incluso a un territorio poético efervescente, como han comentado algunos analistas. Es, pues, una artista con perfil propio, algo que es necesario siempre, pero hay muy pocas como ella.
 Este espectáculo, que estará no menos de cuatro semanas, durante una primera temporada en el teatro de la esquina de Cipreses, como lo subraya su directora Martínez, es una adaptación libre de cinco relatos de Franz Kafka, los cuales han sido transformados en textos teatrales por la misma puestita, quien además es licenciada en Letras y egresada de la UCV. Ella tomó relatos como Un informe para la academia, Un artista del hambre, Un artista del trapecio, Metamorfosis y La ley para elaborar así el básico libreto de trabajo. “Es la consecuencia de una investigación que se hizo a partir de la biografía y la obra en general de Kafka, hasta que pudimos generar un creativo texto para el montaje, de carácter experimental y basado íntegramente la literatura kafkiana”, ha dicho, tras comentar que siempre ha disfrutado con la producción del afamado escritor, quien murió a los 41 años, tras haber nacido en Praga hacia 1883.
  Hotel Kafka es, pues, una adaptación totalmente libérrima, basada en los argumentos de cada uno de esos textos, con sus personajes y sus contenidos. “Lo que hicimos fue ponerlos dentro de un espacio teatral y por eso lo hemos titulado Hotel Kafka, por una natural analogía. Se trata de un espectáculo itinerante y adecuado para hacerlo o mostrarlo en espacios alternativos. Nuestra propuesta para el estreno se inicia en el foyer del primer piso del teatro Nacional y se mueve por todos sus espacios, adecuadamente intervenidos por la escenógrafa Carolina Raga. El público llega a un hotel, donde su dueña invita a los espectadores-huéspedes para que visiten los espacios de dicho local. Pretendemos generar un espacio teatral propicio para la representación de esos cinco textos, con sus cinco espacios y sus cinco atmosferas. El público deambulara por ese hotel y podrá ver así la Metamorfosis”, apunta Marisol, quien aclara que “llego a Kafka porque lo estudie muchísimo, desde cuando incursionaba en la UCV. Me gustan mucho los mal llamados poetas malditos”.
Está considerada como una de las pocas directoras teatrales que trabaja a partir de ideas propias, capaz de generar sus propios textos o reescribir lo que le caiga en las manos. “No tengo miedo a correr riesgos porque vengo del circo y prefiero arriesgar que trabajar en la comodidad de los convencionales. He estrenado montajes como El tour, El banquero anarquista, Reverón y Un fausto anda por la avenida, todos obtenidos a partir de la deconstrucción de los textos teatrales o literarios, a los cuales he considerado como unas herramientas. Por eso mi teatro está basado en la puesta en escena”.
¿Qué  ha pasado con el circo?
 El circo es una herramienta o un lenguaje donde hay un especial trabajo físico con los actores y donde se les exige mucho más a sus intérpretes. Con Hotel Kafka haremos varias temporadas y para fin de año presento un montaje con la Fundación Rajatabla, posiblemente con una pieza de Bertold Brecht.
Nieta talentosa
 No es el primero ni el último trabajo teatral que se aborda desde los textos y la biografia de Kafka, pero creemos que marcarà epoca para la historia de las artes escénicas venezolanas porque la directora Marisol Martìnez  (nieta de Lily Àvarez Sierra y Gabriel Martìnez, valiosa pareja de pioneros del teatro) pretende crear un  espectàculo que estè  a la atura del sufrido existencialismo del escritor, quien viviò una época convulsa y de futuro incierto, muy similar a la que vivimos ahora en el mundo contemporàneo. Ella subrayará, con su trabajo y el de los actores, los verdaderos significados del adjetivo kafkiano que se refiere a las sociedades donde el absurdo es cotidiano.





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