El autor del mensaje del Día Mundial del Teatro del International
Theatre Institut ITI, es el galardonado dramaturgo pakistaní Shahid Nadeem y
hoy las publicamos porque los lectores deben meditarlas, especialmente
los que realizan actividades artísticas como tal y sus espectadores en general.Y nosotros como periodista y dramaturgo aquí estamos, no podíamos obviar esta colaboración de la teatrera Yahaira Salazar, desde aquel París con pandemia,además.
El objetivo de los fundadores de ITI era construir
una organización que estuviera alineada con los objetivos de la UNESCO en
materia de cultura, educación y arte, y que centrara sus esfuerzos en mejorar
el estado de todos los miembros de las profesiones de las artes
escénicas. Ellos concibieron una organización que creó plataformas para el
intercambio internacional y para la participación en la educación de las artes
escénicas, para principiantes y profesionales por igual, así como el uso de las
artes escénicas para el entendimiento mutuo y la paz. El ITI se ha convertido en la organización más
grande del mundo para las artes escénicas, con más de 90 Centros distribuidos
en todos los continentes.
Shahid NADEEM, El teatro como santuario.
Al final de una representación de la
obra de teatro de Ajoka sobre el poeta sufí Bulleh Shah, un anciano, acompañado
por un niño, se acercó hasta el actor que había interpretado el papel del gran
sufí, “Mi nieto no se encuentra bien, ¿podría bendecirlo? dijo, El actor se
sorprendió y contesto: "No soy Bulleh Shah, solo soy un actor que
interpreta el papel". El anciano entonces contesto: "Hijo, no eres un
actor, eres una reencarnación de Bulleh Shah, su Avatar".
De repente, se nos ocurrió un concepto
completamente nuevo de teatro, donde el actor se convierte en la reencarnación
del personaje que interpreta. Explorar historias como la de Bulleh
Shah, historias como esta existen en todas las culturas y pueden
convertirse en un puente entre nosotros los creadores de teatro, una audiencia
desconocida pero entusiasta.
En nuestro compromiso con los desafíos
del presente, nos privamos de las posibilidades de una experiencia espiritual
profundamente conmovedora que el teatro puede proporcionar.
En el mundo de hoy donde la
intolerancia, el odio y la violencia están en aumento, nuestro planeta se está
hundiendo cada vez más en una catástrofe climática, necesitamos reponer nuestra
fuerza espiritual.
Necesitamos luchar contra la apatía, el
letargo, el pesimismo, la avaricia y el desprecio por el mundo en que vivimos,
por el planeta en el que vivimos.
El teatro tiene un papel, un papel
noble, debe dinamizar y hacer avanzar a la humanidad ayudarla a
levantarse antes de que caiga en un abismo. El teatro puede convertir el
escenario en un templo, el espacio de actuación, en algo sagrado.
En el sur de Asia, los artistas tocan
con reverencia el piso del escenario antes de pisarlo, una antigua tradición en
la que lo espiritual y lo cultural estaban entrelazados. Es hora de recuperar
esa relación simbiótica entre el artista y el público, el pasado y el futuro.
Hacer teatro puede ser un acto sagrado y los actores pueden convertirse en los
avatares de los roles que desempeñan.
El teatro tiene el potencial
transformador de convertir la escena en un santuario y ese santuario en
un espacio de actuación.
Biografía de Shahid Nadeem.
Shahid Nadeem, director de teatro y el
más importante dramaturgo pakistaní, también dirige el famoso teatro Ajoka.
Shahid Nadeem nació en 1947 en Sopore,
Cachemira. Se convirtió en refugiado a la edad de un año, cuando su familia
tuvo que emigrar al Pakistán recién creado después de la guerra de 1948 entre
India y Pakistán cerca del conflictivo
estado de Cachemira.
Vivió en Lahore, en Pakistán, donde
realizó su maestría en psicología en la Universidad de Punjab.
Escribió su primera obra de teatro como
estudiante universitario, pero se convirtió en dramaturgo cuando comenzó a
escribir desde su exilio político en Londres obras de teatro para la
compañía disidente paquistaní Ajoka, creada por Madeeha Gauhar, una
activista, con la que luego se
casó.
Ha colaborado con la Televisión
paquistaní como productor y gerente. Ha sido encarcelado tres veces bajo
diferentes gobiernos liderados por el ejército por su oposición al régimen
militar y fue seleccionado como preso de conciencia por Amnistía Internacional.
En la tristemente célebre prisión de
Mianwali Jail, comenzó a escribir obras de teatro para los fines de semana
producidos por y para los prisioneros. Más tarde trabajó como coordinador de
campañas internacionales y ha sido responsable de la comunicación Asia Pacifico
para Amnistía Internacional. Fue becario en el Getty Research Institute,
International Pen, en los Estados Unidos y en el National Endowment for
Democracy.
También es miembro de la red
"Teatro sin fronteras".
Las obras de Shahid Nadeem se han
montado y publicado en Pakistán e India. Sus
obras también han sido montadas y actuadas en el mundo entero incluyendo Bulha en el Hammersmith Teatro (Londres, Reino Unido), Tranvía (Glasgow, Escocia, Reino Unido) y Helsignor (Dinamarca), Amrika Chalo en el Center Davis for
Performing Arts, Universidad de Georgetown, Washington (USA), Bala king en el Black Box Theatre (Oslo, Noruega), Burqavaganza en los Estados Unidos en
El Bravo for Women Theatre (San Francisco), Acquital en Highways(Santa Monica).
Sus obras han sido traducidas al inglés
y publicadas por Oxford University Press, Nick Hern Editores y en varias
antologías.
Recibió la Medalla Orgullo de
Rendimiento en 2009 por el presidente de Pakistán. También ha dirigido
obras para teatro y televisión y organizado el Festival de Teatro por la
Paz en India y Pakistán. Colabora con los principales periódicos
pakistaníes e hindúes y con el servicio BBC Urdu. Produjo
documentales sobre temas culturales, en particular sobre el museo de
Lahore, las costumbres de Punjab, el poeta Iqbal y el pintor Sadeqain.
Las obras de Shahid Nadeem son muy
apreciadas por su audacia en temas socialmente relevantes y a veces tabú como
el extremismo religioso, la violencia hechas a las mujeres, la discriminación
contra las minorías, la libertad de expresión, el clima, la paz y el sufismo. Varias
de sus piezas abordan las cuestiones de la separación del sur de Asia y el
patrimonio cultural común de esta región.
Combina hábilmente temas sociales y
políticos contemporáneos con formas tradicionales y herencia popular para
presentar un teatro entretenido e intelectualmente estimulante. La música forma
parte integral de sus producciones teatrales.
Enseña el arte de escribir en el
Instituto Ajoka de Artes Escénicas y el Instituto de Arte y Cultura, en Lahore.
Versión en español: Yahaira Salazar, presidenta del Nuevo
Centro ITI Venezuela. Instituto Internacional de Teatro ITI.Organización
Mundial para las Artes de la Escena UNESCO.
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